El turoperador británico Thomas Cook, en suspensión de pagos, emplea a unas 2.500 personas de forma directa en España -la mayoría en Canarias y Baleares- donde cuenta con más 12.000 habitaciones repartidas en medio centenar de hoteles de ocho marcas distintas y donde trae cada año a 4 millones de turistas.
Según una información de la compañía fechada el pasado mes de junio y en la que exponía sus planes para invertir 40 millones de euros en España hasta 2020, de esos 2.500 trabajadores, 650 están la oficina que inauguró en 2018 en Palma de Mallorca.
Junto al empleo directo de Thomas Cook en España, desde los sindicatos advierten del daño que puede causar la quiebra a todo el empleo del sector, fundamentalmente en Canarias y Baleares, donde muchas plazas ya estaban reservadas para el turoperador.
Según UGT, la quiebra de la empresa podría hacer peligrar el 10 % de todos los puestos del trabajo del sector hostelero en Canarias, unas 12.000 personas.
La compañía recordaba en junio que cada año traía unos 4 millones de turistas de 15 países diferentes a España, uno de los mercados favoritos de sus clientes por el que quería seguir apostando en un entorno más competitivo modernizando instalaciones.
Así, ese plan de inversión -que presentó en Mallorca el director ejecutivo, Peter Fankhauser- buscaba renovar 10 hoteles de marca propia en España entre los que señalaba Casa Cook en Ibiza, Sunwing Arguineguin en Gran Canaria, Sunwing Fanabe en Tenerife, Cala’n Bosch en Menorca, Sunwing Alcudia y Sentido Cala Vinas, en Mallorca.
En el comunicado, la empresa recordaba también la "joint venture" de inversión sellada con LMEY y que recibió financiación, entre otros, de CaixaBank con 51 millones de euros o el griego Piraeus Bank, con 40 millones.
Desde la entidad española señalan que se trata de un crédito respaldado por hoteles de buena calidad.
En la presentación de este plan para España, Fankhauser mostró su confianza en la marcha del mercado español y de Thomas Cook tras la última inyección de liquidez que había recibido aunque señalaba las dificultades que afrontaba ante la competencia online y la incertidumbre en Reino Unido.
Unos meses antes, en marzo, la empresa también advertía en una presentación a analistas de que las reservas para Canarias y Baleares de cara a este verano eran más flojas en un contexto de recuperación de otros mercados como Turquía, Egipto o Túnez y de la incertidumbre asociada al "brexit".
Thomas Cook, con 178 años de historia, emplea a 20.000 trabajadores en todo el mundo -9.000 en el Reino Unido- y anualmente ofrece servicios a 19 millones de personas en 16 países.