El Tesoro Público español inaugurará el calendario oficial de subastas del mes de octubre el próximo jueves, día 3, con una puja en la que espera colocar entre 2.750 y 4.250 millones de euros en obligaciones a diez y treinta años, y otras obligaciones a diez años indexadas a la inflación.
La subasta del jueves será la primera después de que el pasado martes se publicará el decreto de disolución de las dos cámaras legislativas españolas -Congreso y Senado- y una nueva convocatoria de elecciones previstas para el próximo 10 de noviembre, las cuartas en los últimos cuatro años.
La inestabilidad política que vive España no ha afectado al Tesoro que, según destacan los analistas, sigue consiguiendo una financiación a tipos bajos, que le está ayudando a rebajar su coste medio de deuda.
Por el momento los inversores mantienen la confianza en España, tal y como quedó demostrado el pasado 20 de septiembre, cuando la agencia Standard and Poor's elevó la nota del país un escalón, de notable bajo (A-) a notable medio (A), con perspectiva estable.
La agencia destacó la resistencia de la economía española a pesar del prolongado estancamiento político y de la desaceleración de la zona del euro, aunque advirtió de que la falta de Gobierno podría llegar a tener efectos negativos.