El jefe de operaciones de Credit Suisse, Pierre-Oliver Bouée, presentó su dimisión al asumir su responsabilidad por haber sometido a vigilancia a uno de los directivos del banco después de que éste anunciara su contratación por UBS, informó hoy en un comunicado la primera de estas compañías.
Bouée será sustituido por James Walker, mientras que el jefe de seguridad del banco suizo también ha dimitido, señaló la notificación de Credit Suisse, que, sin embargo exonera, de responsabilidades en el incidente al consejero delegado Tidjane Thiam.
Según las conclusiones ofrecidas por el informe, Bouée ordenó la vigilancia de Iqbal Khan, exdirector del área de gestión internacional de fortunas de Credit Suisse, poco después de que éste anunciara su marcha al banco rival UBS.
La decisión, indica Credit Suisse, se tomó por iniciativa de Bouée sin ser discutida con el consejero delegado y máximo responsable del banco.
"La mesa directiva aprecia que se tomen medidas para proteger los intereses de la compañía, también cuando altos cargos la dejan, pero la decisión de vigilar a Khan fue errónea y desproporcionada", concluyeron.
La vigilancia a Khan causó cierto escándalo la semana pasada, después de que éste se percatara de que estaba siendo seguido por un vehículo cuando conducía en Zúrich, acompañado de su esposa.
Enseguida empezó a fotografiar a sus perseguidores, a lo que los ocupantes del otro vehículo reaccionaron intentando quitarle el teléfono, tras lo cual huyeron, pero fueron detenidos poco después por la policía y confesaron que habían sido contratados por la propia Credit Suisse.