Madrid, 10 oct (EFECOM).- La agencia internacional de medición de riesgo Fitch ha degradado este jueves la calificación de la constructora OHL tres escalones al pasar de B+ a CCC+, el séptimo escalón de lo que se conoce en el argot financiero como bono basura.
Esta rebaja se produce por el debilitamiento del perfil financiero de la constructora, que tiene problemas en varios proyectos heredados del pasado que arrojan pérdidas, además de por su poca capacidad para generar efectivo.
A pesar de este recorte, la agencia con sede en Londres considera que la empresa tiene una perspectiva "estable" y que su resultado bruto de explotación (ebitda) crecerá un 4 % a medio plazo y ha destacado de forma positiva su sólida posición en el sector del transporte y su diversificación.
Fitch no ha tomado en cuenta a la hora de elaborar este pronóstico el proyecto de Canalejas que podría proporcionar, según su opinión, a OHL un efectivo adicional que mejore sus perspectivas a medio plazo.
La agencia de calificación asegura en su informe que el consumo de caja a medio plazo es una de las debilidades claves de la empresa y prevén que la cantidad de dinero disponible para cubrir deuda o repartir dividendos será negativa, en concreto de 680 millones de euros entre 2019 y 2021.
Según fuentes de la constructora esta rebaja de Fitch es "sorprendente e inconsistente" por el momento en el que se ha producido y ha calificado su aproximación de "conservadora", ya que no toma en cuenta la recuperación de la empresa en los últimos trimestres sobre todo en el sector de la construcción.
Para OHL "no hay motivos que justifiquen la decisión adoptada por Fitch" ya que en su análisis no hay novedades relevantes y muchos de sus datos fueron comunicados por la propia empresa en la presentación de los resultados de febrero de este año.