Santiago de Compostela, 22 oct (EFECOM).- El consejero de Economía e Industria de la Xunta de Galicia, Francisco Conde, ha presentado este martes las medidas que trasladará al Gobierno central como propuestas para el estatuto del consumidor electrointensivo, “ante su falta de concreción y de respuesta”.
“Hemos decidido impulsar una serie de medidas para que el Gobierno central pueda reaccionar, trasladar confianza a las empresas y mantener el empleo y la actividad industrial”, ha explicado Conde en declaraciones a la prensa.
En concreto, la Xunta de Galicia pedirá la categorización de determinadas empresas -como Alcoa- como hiperelectrointensivas, así como una serie de medidas fiscales como la supresión del céntimo verde, el impuesto a la generación eléctrica o la reducción de costes y cargos de peaje por el transporte.
Por otra parte, el Ejecutivo gallego también pedirá una ampliación de los créditos y ayudas a la compensación por los costes de emisión de dióxido de carbono (CO2) de estas empresas, toda vez que el Gobierno central “habló de una posible ampliación, pero no se llegó a concretar”.
“Estas medidas permitirían a las empresas competir en igualdad de condiciones si tienen también un precio competitivo para la electricidad, situado en una horquilla entre los 35 y los 40 megavatios por hora”, ha añadido el consejero, en la línea con lo que había planteado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en una visita a la empresa Cortizo, en Padrón (La Coruña).
Conde entiende que esta batería de medidas “son la vía para poder mantener el empleo y poder dar respuesta a las empresas y, sobre todo, a los trabajadores”, ya que en estos momentos “están esperando una reacción por parte del Gobierno central”, por eso la Xunta de Galicia “toma la iniciativa”.
“La Xunta va a trasladar estas medidas a los diferentes grupos políticos para que haya un frente común ante el Gobierno y se produzca esta reacción: estamos ante una decisión desde el punto de vista político, industrial y el empleo”, ha proseguido Conde, quien ha lamentado que “llevamos un año esperando por el estatuto del consumidor electrointensivo”.