Las Palmas de Gran Canaria, 27 oct (EFECOM).- El secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha considerado este domingo que la pregunta que tienen que responder los partidos que concurren a las elecciones el 10 de noviembre es qué van a hacer para afrontar la desaceleración económica que afecta a España.
El candidato a presidente del Gobierno por Unidas Podemos ha reiterado que el "plan" de Pedro Sánchez en estas nuevas elecciones generales es pactar con Pablo Casado, líder del PP.
"A nosotros no se nos compra con sillones. Estamos aquí para poder cambiar la vida de la gente y, por eso, Pedro Sánchez no nos quiere en el Gobierno", ha asegurado Iglesias en un mitin celebrado en la capital grancanaria.
Además de recordar que en Canarias Podemos "ya es gobierno para tener competencias con las que poder cambiar la vida de la gente", Iglesias ha subrayado que "de eso va la política", y no de tener una vicepresidencia o un Ministerio de Vivienda que la formación morada rechazó porque desde él no hubiera podido "evitar desahucios o intervenir en el mercado para regular los precios de los alquileres".
A juicio de Iglesias, en esta nueva campaña electoral, además de Cataluña y de Franco, se debe hablar de cómo se va a afrontar en España la desaceleración económica para que esta coyuntura no se traduzca nuevamente en destrucción de empleo, incapacidad para pagar facturas, emigración, y, en definitiva, más precariedad para la mayoría social del país.
"Ese es el gran tema de esta campaña y nadie quiere hablar de eso", cuando hay que responder "si los recortes vendrán por arriba o por abajo", es decir, aclarar "si la mayoría social va a tener que volver a cargar sobre sus hombros una crisis de la que no es responsable", ha aseverado.
Según el líder de Unidas Podemos, sólo con aplicar el programa electoral de su partido, se podrían resolver muchos de los problemas que afectan a los españoles.
Se trataría, ha dicho, de hacer cumplir el artículo 31 de la Constitución Española, que establece una fiscalidad progresiva; el 35, que propugna el derecho al trabajo y a una remuneración digna; el 47, relativo al derecho a la vivienda; el artículo 50, que determina que la actualización de las pensiones se ha de ligar por ley a la evolución del IPC, o el 128, que establece que la riqueza del país estará subordinada al interés general.