Madrid, 30 oct (EFECOM).- El exresponsable de la división de planificación financiera de Caixanova Domingo González Mera ha asegurado este miércoles en la Audiencia Nacional que el fracaso de la operación inmobiliaria en Rivas (Madrid), se debió al desplome de los precios del sector provocado por la crisis.
González Mera, que ha rechazado responder a las preguntas de la fiscalía Anticorrupción, se enfrenta a una petición de cuatro años de cárcel por administración desleal por parte del ministerio público, la misma que para otros tres directivos de la antigua caja gallega, entre ellos el expresidente Julio Fernández Gayoso.
Los acusados habrían participado en 2007 en la concesión de un préstamo por importe de 67,1 millones de euros para la compra de un solar a una sociedad participada por varias mercantiles vinculadas a la caja gallega, entre ellas Gorrigebe, cuyo único propietario era Antonio Gorriarán, hermano de uno de los investigados, Gregorio Gorriarán.
Ello le supuso a la entidad un perjuicio de 42 millones de euros.
Ante la sección cuarta de la Sala de lo Penal, González Mera ha defendido las refinanciaciones de que fue objeto el préstamo, que según la Fiscalía Anticorrupción no fueron consultadas al consejo de administración y no contaron con la preceptiva solicitud expresa.
Dicha refinanciación habría sido formalizada fuera de los cauces por González Mera y el ex director general José Luis Pego, también acusado.
González Mera ha relatado que en el momento de la firma del préstamo, 2007, el mercado inmobiliario era muy distinto que en los años posteriores, cuando se convirtió en "inviable, lo que se podía vender en 2007 no se puede vender a precios en 2010".
Y la única forma que tenia la caja de ahorros de recuperar su dinero era colaborar para que la sociedad diera vender el suelo, reparcelar y vender viviendas, y no dejar que entrara en concurso de acreedores.
La deuda, ha explicado González Mera, sólo se puede cobrar si se venden las parcelas, con lo cual hay que facilitar esa venta.