El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha decidido bajar los tipos de interés en 25 puntos básicos, hasta situarlos en un rango objetivo de entre el 1,50% y el 1,75%, según ha informado este miércoles. Se trata de la tercera rebaja consecutiva que realiza la autoridad monetaria este año.
La Fed ha explicado que en las ultimas semanas el mercado de trabajo se ha mantenido "sólido" y la actividad económica del país ha seguido creciendo a un ritmo "moderado". No obstante, la institución ha notado que la inversión empresarial y las exportaciones "han permanecido débiles".
Así, el banco central estadounidense ha justificado su decisión en las "implicaciones" de los desarrollos globales para las perspectivas económicas, así como las "débiles" presiones inflacionistas. De cara a decidir los futuros ajustes en el precio del dinero, la autoridad monetaria ha subrayado que "monitorizará" las implicaciones de los nuevos datos para las perspectivas de la economía.
"Esta acción apoya la visión del Comité de que una expansión sostenida de la actividad económica, unas condiciones del mercado laboral sólidas y la inflación cerca del objetivo simétrico del 2% son los desarrollos más posibles, pero que sigue habiendo incertidumbres a este pronóstico", ha indicado la Fed.
Al igual que en las últimas reuniones, la decisión se ha vuelto a tomar sin consenso. La mayoría de banqueros centrales ha votado a favor de esta rebaja de 25 puntos básicos, mientras que la presidenta del Banco de la Reserva Federal de Kansas City, Esther George, y el presidente del Banco de la Reserva Federal de Boston, Eric Rosengren, se han mostrado a favor de mantener los tipos sin cambios.
Mercado laboral
El mercado de trabajo estadounidense generó 136.000 empleos no agrícolas durante el pasado mes de septiembre, al tiempo que la tasa de paro descendió hasta el 3,5% (5,77 millones de personas). De esta forma, el desempleo volvió a bajar hasta su mínimo desde diciembre de 1969, de acuerdo a los registros del Departamento de Trabajo estadounidense.
La economía experimentó un crecimiento anualizado el 1,9% en el tercer trimestre del año, lo que representa un caída de una décima con respecto al trimestre inmediatamente precedente, según la primera estimación del dato publicada por la Oficina de Análisis Económico del Gobierno de EEUU.
De su lado, el índice de precios de gasto de consumo personal, la estadística elegida por la Fed para monitorizar la inflación de EEUU, creció un 1,4% en agosto, último dato disponible, en comparación con el mismo mes del año pasado. La tasa mensual no registró cambios en el octavo mes del año. La inflación subyacente, que excluye de su cálculo los precios de la energía y los alimentos por su mayor volatilidad, se situó en el 0,1%, mientras que en tasa anual avanzó un 1,8%.