Madrid, 30 oct (EFECOM).- El Banco Santander obtuvo en España un beneficio neto de 1.185 millones de euros entre enero y septiembre de 2019, un 3,4 % más que un año antes, tras completar la integración del Banco Popular.
Según la información remitida hoy por la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los préstamos y anticipos a la clientela se redujeron un 4,6 % y quedaron en poco más de 188.000 millones de euros, acusando "el desapalancamiento en banca mayorista por el entorno de mercado y la evolución hacia un modelo eficiente en capital".
Según explica el banco, a esto se une que la producción en hipotecas "todavía no compensa los vencimientos", aunque el volumen concedido en créditos para consumo creció en el año.
El ratio de mora cerró septiembre en el 7,23 %, 0,32 puntos básicos menos que un año antes, en tanto que el ratio de cobertura empeoró hasta el 40,6 %.
Los recursos de la clientela, por su parte, aumentaron un 3,1 % o en 8.825 millones de euros en comparación interanual y alcanzaron los 246.017 millones.
Los fondos de inversión aumentaron en 1.445 millones de euros y los depósitos a la vista, en 12.780 millones, parcialmente compensados por los menores depósitos a plazo, explica la entidad.
En cuanto a los principales márgenes de la cuenta, en un entorno de tipos bajos, el margen de intereses disminuyó un 2 %, y quedó en 2.985 millones, por menores volúmenes y el impacto de normativa NIIF 16, compensado parcialmente por la mejora del diferencial de clientes.
Las comisiones bajaron un 7 %, por la menor actividad en al área de banca de empresas (SCIB) y el cambio hacia fondos de inversión más conservadores. Los resultados de operaciones financieras (ROF) subieron un 24 %, gracias a una gestión activa de las carteras aprovechando los movimientos del mercado.
Prosiguió la fuerte reducción de costes (7 % interanual), por las eficiencias generadas con la integración del Popular y por el esfuerzo en optimización.
Respecto al trimestre anterior, el beneficio ordinario subió un 45 % por menores costes y dotaciones, una gestión activa de las carteras y la contabilización en el segundo trimestre de la contribución al Fondo Único de Resolución (FUR).
El beneficio ordinario atribuido ascendió a 1.185 millones de euros, un 3 % más que en 2018, fundamentalmente por los menores costes.