Madrid, 12 nov (EFECOM).- La salida del fútbol por parte de Vodafone España ha sido una decisión "claramente positiva", como se refleja en los resultados de la compañía que, pese a que ha visto descender sus ingresos en un 10,3 % en su primer semestre fiscal (de abril a septiembre), sí aprecia un "cambio de tendencia" positivo.

Lo ha dicho el presidente de Vodafone España, António Coimbra, que ha presentado en rueda de prensa en Madrid los resultados de la compañía, que ingresó en su primer semestre fiscal 2.161 millones de euros, 1.079 millones de euros en este último trimestre (de julio a septiembre), un 10,3 % menos que en los mismos tres meses del año pasado -mismo porcentaje que en el semestre-.

Después de cuatro trimestres de "reposicionamiento", Vodafone España presenta una "inflexión" que continuará, ha afirmado.

Este trimestre coincide con el lanzamiento comercial del 5G en junio en 15 ciudades de España, que ha afectado de forma positiva en el resultado de la operadora, pero especialmente en su imagen de marca, según Coimbra, que ha avanzado que Vodafone llevará el 5G a otras 5 ciudades de España en los "próximos meses".

Este último año ha sido muy intenso para Vodafone, que ha crecido pese al entorno "adverso" que existía y tras impulsar tres medidas: la salida del fútbol, la fusión de la parte de operaciones y negocios, y la compartición de redes.

El dejar de emitir fútbol afectó más en la temporada pasada que en la actual, teniendo en cuenta que entonces fue cuando dejó de emitir El Partidazo y la Champions. Esta temporada, cuando ha dejado de emitir LaLiga, el impacto ha sido menor.

"Vodafone no tiene nada en contra del fútbol y nos gustaría tenerlo en nuestra oferta, nos salimos porque era un segmento no rentable y por una regulación asimétrica que nos penaliza", ha recordado el presidente, que ha ido más allá al decir que si hubieran seguido con las emisiones de fútbol, por este concepto, hubieran gastado 330 millones de euros y, sin embargo, solo hubieran ingresado 300 millones.

En cuanto a la compartición de redes, una forma de buscar la eficiencia, manteniendo la diferenciación, se ha referido al acuerdo con Orange, que afecta a las ciudades por debajo de 175.000 habitantes en tecnología 2G, 3G, 4G y, "seguramente", 5G.

A su juicio, este acuerdo es positivo porque les permite mejorar la cobertura en estas zonas, al tiempo que les facilita invertir y desplegar más rápido el 5G.

En este segundo trimestre del año, Vodafone ha crecido en los principales segmentos comerciales, al ganar más de 7.000 clientes móviles de contrato, 26.000 clientes de fibra y 20.000 en Vodafone TV.

La operadora ha alcanzado los 2 millones líneas en las nuevas tarifas de las que 1.200.000 son líneas con datos ilimitados, lo que supone el 75 por ciento de las nuevas altas, según Coimbra, que no ha detallado cuales de estas altas se corresponden con la línea de bajo coste Lowi, aunque ha reconocido que el mercado se está abocando a la gama baja.

Ha destacado que en este trimestre se ha crecido en fibra y televisión sin tener fútbol, lo que significa que su estrategia por apostar por el cine series y por las tarifas ilimitadas está funcionando.

Se ha referido al negocio de empresas, que representan un 30 por ciento de los ingresos y que sigue muy sano.

En cuanto a los nuevos negocios, los ingresos por inteligencia artificial han crecido un 16 % en el semestre, respecto a 2018, un 43 % en lo que concierne a la nube (Clud @ Hosting).

Desde el lanzamiento del 5G, Vodafone está desarrollando numerosos casos de uso en el ámbito empresarial, aprovechando la alta velocidad, baja latencia y grandes capacidad de esta tecnología. En total, ya trabaja en 36 casos de uso junto a entes públicos.

El grupo Vodafone, que ha presentado hoy resultados, ha reducido sus pérdidas atribuidas en el semestre entre abril y septiembre hasta 2.128 millones de euros, frente a las pérdidas de 7.934 millones de euros del mismo periodo de 2018.