Bilbao, 13 nov (EFECOM).- ITP Aero ha invertido 360 millones de euros en cinco años en I+D+I para atender la demanda creciente de los componentes que fabrica, los utilizados en el recubrimiento de motores aeronáuticos -llamados "externals"-, de los que ha comentado que hay una gran demanda.
La firma ha inaugurado su nueva planta ubicada en el Parque Tecnológico de Bizkaia, en Derio, en la que ha invertido 14,2 millones de euros para producir los "externals".
La nueva planta acoge a 115 empleados, con previsiones de llegar a 160. La factoría ha sido inaugurada oficialmente con la presencia del lehendakari, Íñigo Urkullu, y del presidente de la compañía, Josep Piqué.
En ella se diseñan y fabrican los llamados "externals", componentes utilizados en el recubrimiento de motores aeronáuticos, como los sistemas de fluidos y estructuras.
Los clientes son los motoristas aeronáuticos, como el principal accionista de ITP, Rolls Royce, pero también otros como Pratt & Whitney y Honeywell.
La nueva planta cuenta con oficinas de ingeniería, desarrollo y producción de diversos componentes, además de albergar la sede global del área de negocio de Externals de ITP Aero.
Josep Piqué ha recordado que la empresa cumple este año 30 años, en los que se ha situado a la vanguardia gracias a un extraordinario esfuerzo tecnológico y a su capital humano.
En la misma línea, Carlos Alzola, director general de ITP Aero, ha comentado que se espera que la demanda de "externals" aumente significativamente a lo largo de los próximos años debido a los requisitos tecnológicos y medioambientales, cada vez mayores, que deben cumplir los nuevos motores aeronáuticos.
Por ello, la nueva planta ha sido dotada con las últimas tecnologías en procesos de unión y conformado de superaleaciones.
Esta planta supone la primera inversión fuerte tras el cambio de accionariado de ITP del año pasado, cuando Rolls Royce compró la parte de Sener y quedó como único accionista.
El lehendakari también ha resaltado "con orgullo" la apuesta de ITP por la tecnología propia, una mejora continua que ha llevado a la multinacional vasca a ser actualmente la novena compañía de motores y componentes aeronáuticos por ventas del mundo.
Cuenta con centros productivos en España, Gran Bretaña, Malta, Estados Unidos, India y México y una plantilla de más de 3.800 empleados.