Washington, 20 nov (EFECOM).- General Motors (GM) acusó hoy a Fiat Chrysler (FCA) de fraude organizado por supuestamente sobornar al sindicato United Auto Workers (UAW) para influir en las negociaciones que la compañía mantenía con los representantes sindicales para la firma de un convenio colectivo.
Las acusaciones de GM contra FCA están reflejadas en una demanda presentada hoy por el principal fabricante de automóviles de Estados Unidos en un tribunal de Detroit (Michigan).
El vicepresidente ejecutivo y asesor jurídico de GM, Craig Glidden, afirmó en un comunicado de que "esta demanda tiene la intención de hacer que FCA responda del daño que han causado sus acciones a nuestra compañía y asegurar que todos siguen las mismas reglas de ahora en adelante".
GM señaló que FCA "corrompió la implementación del acuerdo del convenio colectivo de 2009. También corrompió la implementación y administración de los convenios de 2011 y 2015".
La intención de FCA, según la demanda de General Motors, era forzar la fusión entre las dos compañías, algo que el ya fallecido consejero delegado de Fiat Chrysler, Sergio Marchionne, buscó en varias ocasiones durante años. La última vez fue en la primavera de 2015, cuando GM rechazó públicamente las ofertas de FCA.
Se da la circunstancia de que FCA acaba de anunciar un acuerdo de fusión con el fabricante PSA (Peugeot, Citroën, DS y Opel) y está en negociación con esta empresa francesa para materializarlo.
GM alega que Marchionne conspiró con el expresidente de UAW, Dennis Williams, amigo del directivo italo-canadiense, y otros altos funcionarios del sindicato, para que el proceso de negociación del convenio colectivo "dañase GM" e "intentase forzar la fusión de las compañías".
FCA y UAW querían, según la demanda, provocar que el resultado de las negociaciones laborales costasen a GM "miles de millones de dólares".
Cada cuatro años, el sindicato UAW elige a uno de los tres grandes fabricantes de automóviles estadounidenses (GM, FCA y Ford) para fijar las líneas generales que regirán los convenios colectivos del sector.
Según GM, en 2015 los directivos de FCA y UAW conspiraron para que Fiat Chrysler fuese la empresas que estableciese el estándar de negociación, lo que supuso que General Motors acabase aceptando un acuerdo que le costó 2.000 millones de dólares, el doble de lo inicialmente anticipado.
La demanda de GM es fruto de la investigación federal iniciada en 2017 contra directivos de FCA y UAW y que, de momento, ha supuesto la imputación de trece personas de las dos organizaciones e implica al menos a dos antiguos presidentes del sindicato.
Esta es la primera vez que la demanda señala a Marchionne, que falleció de forma inesperada en julio de 2018, como cerebro de la presunta operación fraudulenta.
Glidden señaló que han "alegado en la demanda que Marchionne es responsable de concebir, ejecutar y patrocinar la infracción". La demanda también señala a los exdirectivos de FCA Al Iacobelli, Jerome Durden y Michael Brown.
Los tres antiguos empleados de FCA se han declarado culpables de fraude en la investigación federal al sindicato.