El entorno de bajos tipos de interés generado por la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) está respaldando la actividad económica de la zona euro, pero también está llevando a fondos de inversión, aseguradoras y fondos de pensiones a asumir riesgos cada vez más elevados, lo que podría llegar a poner en peligro la estabilidad financiera, según ha advertido el vicepresidente de la institución, Luis de Guindos.

 

 El vicepresidente del BCE ha destacado en la presentación del 'Informe de Estabilidad Financiera' que "entidades no bancarias, como los fondos de inversión, las compañías de seguros y los fondos de pensiones, que desempeñan un papel cada vez más importante en la financiación de la economía real, han seguido asumiendo más riesgos y han aumentado su exposición a los segmentos más arriesgados de los sectores corporativo y soberano".

 

 En este sentido, el vicepresidente del BCE ha advertido de que en el caso de una repentina corrección del precio de los activos financieros, el creciente riesgo de crédito y de liquidez en áreas del sector financiero no bancario de la zona del euro, sumado al mayor apalancamiento en los fondos de inversión, puede llevar a estas entidades a responder de formas que provoquen que el estrés se contagie al conjunto del sistema financiero.

 

 Así, el exministro español ha señalado que los bajos tipos de interés deberían respaldar la actividad económica en la zona euro, pero también pueden alentar la toma excesiva de riesgos por parte de algunas instituciones financieras no bancarias y empresas altamente apalancadas, así como en algunos mercados inmobiliarios.

 

 "Si bien el entorno de bajos tipos de interés respalda la economía en general, también observamos un aumento en la toma de riesgos que garantiza un monitoreo continuo y cercano", ha apuntado Luis de Guindos, para quien las autoridades deberían utilizar las herramientas disponibles para abordar la acumulación de vulnerabilidades cuando sea posible".

 

 Por otro lado, el banquero central ha reconocido que las perspectivas de rentabilidad del sector bancario de la eurozona "se han deteriorado", a pesar de las expectativas de un modesto incremento de los ingresos por intereses netos y comisiones, anticipando que las débiles proyecciones para la economía y las ineficiencias de costes y sobrecapacidad del sector seguirán presionando a la baja la rentabilidad financiera de las entidades.

 

 Asimismo, Guindos ha añadido que también persisten "bolsas de vulnerabilidad" en el sector empresarial y en algunos mercados inmobiliarios, donde los bajos costes de financiación alientan el endeudamiento de firmas de mayor riesgo, mientras que en algunos países de la eurozona se han seguido produciendo aumentos de precio de las propiedades.