La OTAN firmó este miércoles con Boeing un contrato por valor de 1.000 millones de dólares para modernizar la flota de aviones de vigilancia AWACS, de manera que sigan operativos hasta 2035.
"Los AWACS han sido nuestros ojos en el cielo, dando apoyo a nuestras operaciones aéreas durante décadas. Desde patrullar los cielos americanos en el 11S hasta nuestras operaciones en Afganistán y como parte de la coalición global contra el Estado Islámico", indicó el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, que confirmó que la OTAN seguirá siendo "líder en tecnología".
Stoltenberg firmó el acuerdo con el presidente de Boeing International, Michael Arthur, quien destacó que su empresa trabajará asociada con empresas europeas, entre ellas la española Indra.
"Es una verdadera asociación transatlántica, norteamericana y europea, desde el lado industrial", comentó Arthur en una rueda de prensa.
En total, 16 de los 29 aliados, de ambas orillas del Atlántico, financian esta modernización, entre ellos España, y empresas de Europa y Norteamérica participan en su desarrollo.
Los AWACS son una de las pocas capacidades en propiedad de la OTAN.
En concreto, se trata de una flota de aviones E-3A de Boeing con un sistema aéreo de alerta y control (AWACS) con sus distintivas cúpulas con radar montadas sobre su fuselaje.
Esas aeronaves proporcionan a la Alianza vigilancia aérea, comando y control, gestión del espacio de batalla y comunicaciones.
Hasta 14 de esos aviones se encuentran en la base aérea de Geilenkirchen (Alemania).
En paralelo, la OTAN se ha propuesto adquirir el llamado sistema aliado de vigilancia de tierra (AGS, en inglés), que dará a los comandantes una perspectiva integral de la situación sobre el terreno.
Un grupo de 15 países aliados va a adquirir el sistema AGS, compuesto por cinco aviones de control remoto RQ-4D de la OTAN y las estaciones de comando y control terrestres asociadas de origen europeo, según la organización.
La OTAN los operará y se ocupará de mantenerlos en nombre de todos los aliados.
El avión AGS NATO RQ-4D se basa en el bloque 40 Global Hawk de la Fuerza Aérea estadounidense.
Ha sido adaptado de manera única para cumplir los requisitos de la OTAN, a fin de proporcionar a la Alianza una capacidad de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) de última generación, según la organización.