París, 27 nov (EFECOM).- Cientos de agricultores llegados de diferentes regiones de Francia bloquearon este miércoles con tractores los accesos a París para pedir al Ejecutivo mejoras para su sector, del que subrayan que no puede competir ni en precio ni en condiciones contra las grandes superficies.
El sector organizó una "operación caracol" y protestas en la capital y en otras ciudades francesas en respuesta al llamamiento de la Federación Nacional de Sindicatos de Explotadores Agrícolas (FNSEA) y Jóvenes Agricultores (JA).
El colectivo quería denunciar el "agribashing", o estigmatización y denigración de los agricultores, y conseguir una entrevista con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, para presionar en las negociaciones anuales con el sector de la distribución.
Aunque querían una reunión directa con el jefe del Estado, fueron recibidos en su lugar por representantes del Ministerio de Agricultura.
Su movilización sucede a las organizadas los pasados 8 y 22 de octubre.
"Los servicios estatales deben centrarse en apoyar la agricultura en lugar de aplicar distorsiones que provocan mayores cargas y que hunden nuestra competitividad, nuestros ingresos y nuestras filiales", dijo en el anuncio de esta nueva convocatoria el secretario general de FNSEA, Jérôme Despey.
El colectivo denuncia que el acuerdo de libre comercio de Canadá y la UE (CETA) y el negociado con los países del Mercosur son "intolerables", y pidió acciones concretas para solventar una situación en la que sus costes "van al alza" y sus precios "siguen siendo insuficientes".