El presidente de Iberia, Luis Gallego, ha salido este miércoles al paso de las críticas al transporte aéreo de activistas medioambientales como la adolescente sueca Greta Thunberg y ha asegurado que en trayectos, por encima de 1.500 kilómetros, no hay un modo de transporte alternativo al avión.
Preguntado, en un encuentro informativo de CEOE y Cepyme por cómo convencería a Greta Thunberg para que montara en un avión, Gallego ha señalado que la activista sueca "está en su derecho de elegir el medio de transporte que desee", pero la alternativa de volar o no, no es del todo real.
El presidente de Iberia ha añadido que, mientras existen medios de transporte alternativos para un vuelo de menos de 1.500 kilómetros, en trayectos superiores, no hay una alternativa real al avión.
Gallego ha explicado que, a diferencia de otros sectores como por ejemplo al automovilístico, el de aviación va a tardar años en lograr que el avión eléctrico sea una alternativa real.
El avión eléctrico llegará, pero todavía quedan años para poder transportar el volumen de pasajeros necesarios con este tipo de tecnología, ha matizado.
Las aerolíneas están sufriendo mucha presión por el tema de las emisiones de CO2, a pesar de que el tráfico aéreo supone solo un 2,5 % de las globales, ha lamentado.
Gallego ha recordado que el grupo IAG, al que pertenece Iberia, se ha comprometido a llegar a cero emisiones de carbono para 2050 y está invirtiendo mucho dinero en flota, además de tomar otras medidas.
Aunque es verdad que, en la actualidad, los aviones son un 80 % más eficientes de lo que eran en los años 60, la falta del cielo único europeo obliga a volar desde puntos de control a otros, lo que hace que la ruta se opere en zigzag.
Ene este sentido, ha remarcado que hay también muchas cosas que se pueden hacer por los gobiernos como precisamente el cielo único europeo, que posibilitaría que los aviones fueran mucho más eficientes a la hora de volar.