Madrid, 4 dic (EFECOM).- Trenes hechos con fibra de carbono que pesen menos y consuman menos, reciclar plásticos para fabricar hidrógeno o sistemas de carga de automóviles por inducción en autopistas son algunas de las tecnologías en las que están investigando empresas españolas para reducir la huella de carbono y luchar contra el cambio climático.
Altos responsables de Ferrovial, Enagás, Talgo, Ceralto Siro Foods y la Fundación Eroski han participado este miércoles en la Cumbre del Clima de Naciones Unidas COP 25 en un panel sobre tecnologías innovadoras para la descarbonización de los sectores y el papel de la industria.
El consejero delegado de Ferrovial, Ignacio Madridejos, ha explicado que para Ferrovial, una compañía de infraestructuras, los retos son la movilidad, para lo que dispone del servicio de coche compartido Zity, la ecología y la eficiencia energética en los edificios.
En infraestructuras, ha dicho que Ferrovial se ha planteado por qué no generar energía en las autopistas y que haya sistemas de carga de vehículos por inducción en esas vías, una área en la que ha dicho está trabajando su compañía, que puso en marcha en Dallas la primera autopista neutral en carbono.
El consejero delegado de Enagás, Marcelino Oreja, ha afirmado que la compañía ha reducido un 50 % sus emisiones en cuatro años y está comprometida en sumar un 20 % más de reducción hasta 2030.
Ha explicado que Enagás quiere hacer con hidrógeno algunos de sus procesos industriales y que están hablando con Renfe para usar gas en el sistema ferroviario, a fin de reducir el consumo de diésel que aún persiste en algunas líneas de ferrocarril.
Oreja ha dicho que en la lucha contra el cambio climático "tenemos que ser rápidos" y, por lo tanto, utilizar las tecnologías ya disponibles, como cambiar en los vehículos el uso de combustibles fósiles por gas licuado del petróleo (GLP), que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, ha declarado que Enagás está invirtiendo mucho en hidrógeno y tiene varios proyectos piloto, entre los que se encuentra el proyecto de una planta de dos megavatios (MW) en Baleares.
Ha explicado que el hidrógeno sustituirá a otras tecnologías y se podrá almacenar para producir electricidad en el futuro y ha apuntado a otro de los proyectos piloto de la compañía: el de producir hidrógeno a partir de plástico reciclado, para lo que se necesitarían 25 toneladas de plástico diarias.
El presidente de Talgo, Carlos de Palacio, ha recordado que los trenes son el medio de transporte que genera menos emisiones, una quinta parte de las de un coche y un tercio de las de los aviones, y ha destacado que, además, Talgo fabrica unos trenes entre un 25 % y un 30 % más ligeros que los de los otros fabricantes, con lo que consumen en torno a un 25 % y un 30 % menos de energía.
De Palacio ha explicado que tiene previsto reducir aún más el peso de los trenes con su fabricación con fibra de carbono, y ha añadido que en un futuro próximo anunciará su primer tren hecho con fibra de carbono y que use como fuente de energía hidrógeno, aún más limpio que la electricidad.
El fundador de Cerealto Siro Foods, Juan Manuel Gómez de la Serna, ha explicado que para su compañía la reducción de la producción de residuos es uno de los vectores de su estrategia y desde 2018 todas sus fábricas tienen residuo cero porque no se tira nada, pues todo se usa otra vez para alimentación humana o animal, y todo lo que no puede usarse como alimento se convierte en gas que la empresa utiliza en sus usos industriales y en fertilizantes.
El presidente de la Fundación Eroski, Alejandro Martínez Berriochoa, ha indicado que de aquí a 2025 tiene previsto reducir el 20 % del plástico que se usa, aunque ha explicado que es un "problema" para la distribución, pues su eliminación puede acarrear problemas de seguridad alimentaria y reducir la vida del producto.