Bilbao, 9 dic (EFECOM).- El Movimiento de Pensionistas de Bizkaia ha llevado a cabo hoy su concentración número 100 desde que hace casi dos años comenzó a congregarse todos los lunes ante el Ayuntamiento de Bilbao, en un acto en el que han predominado los llamamientos a la "unidad" por la existencia de un sector del colectivo que se opone a la huelga general anunciada para el próximo 30 de enero.

Bajo los paraguas, a cubierto de la lluvia que caía este mediodía en Bilbao, cientos de jubilados y pensionistas se han concentrado de nuevo ante la casa consistorial, en la protesta número 100 de este tipo desde que las iniciaron en enero de 2017, en demanda de reivindicaciones como una pensión mínima de 1.080 euros.

En el acto, los portavoces del Movimiento de Pensionistas de Bizkaia han insistido en la necesaria "unidad" del colectivo, dado que sindicatos como CCOO y UGT y un sector de los pensionistas está en contra de la huelga general anunciada para el próximo 30 de enero por la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria, en la que se integran sindicatos nacionalistas como ELA y LAB y numerosos colectivos.

Los jubilados y pensionistas vizcaínos se preparaban hoy para la concentración que llevarán a cabo el próximo jueves ante el Parlamento Vasco, en Vitoria, junto a compañeros de Álava y Gipuzkoa, para reclamar que las pensiones mínimas se complementen hasta los 1.080 euros, entre otras medidas.

A falta de un par de días para cerrar las inscripciones, los pensionistas vizcaínos ya han llenado 15 autobuses para viajar a la capital alavesa y esperan sumar algunos vehículos más.

El colectivo pretende que el Parlamento Vasco apruebe un texto legislativo para la mejora de las pensiones públicas que después sea llevado a las Cortes Generales. "Que el Gobierno y el Parlamento vascos planteen en Madrid la defensa por ley de lo que demandamos", han pedido.