(Actualiza la EC4334 con más datos)
Madrid, 12 dic (EFECOM).- Endesa sustituirá con renovables prácticamente la misma cantidad de potencia instalada que se clausurará con los cierres el próximo año de las centrales de Andorra (Teruel) y Compostilla, en León, mediante la instalación de 2.115 megavatios (MW) renovables frente a los 2.153 MW que se cerrarán.
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha detallado este jueves, durante su participación en un panel sobre transición justa dentro de la Conferencia de la ONU por el Clima, la COP25, los planes para compensar los cierres de estas dos centrales térmicas, que se clausurarán a mediados de 2020.
Las inversiones en renovables para las zonas de estas centrales ascienden a 1.828 millones de euros (1.487 millones para Andorra y 341 millones para Compostilla).
Endesa tiene ya solicitados los cierres de las centrales de Compostilla y Andorra, y ha anunciado la discontinuidad de operaciones, previa a la solicitud de cierre, de las centrales de As Pontes (A Coruña) y Litoral, en Almería.
Los cierres de las cuatro centrales de carbón de Endesa en la Península supondrán la clausura de más de 4.600 MW de potencia y afectan a unos mil empleos directos en total.
En Andorra y Compostilla, se cerrarán 2.153 MW en total y entre las centrales de carbón de As Pontes y Litoral alrededor de 2.500 MW.
Bogas ha explicado que, en el caso de las dos primeras centrales, está previsto sustituir la potencia que se cierre con 2.115 MW de renovables, prácticamente la misma que se va a clausurar, aunque la distribución entre los dos emplazamientos no va a ser homogénea.
En la central leonesa, dada su situación geográfica y las condiciones meteorológicas, sólo son viables unos 390 MW de renovables, mientras que en la turolense se puede llegar a algo más de 1.700 MW, la mayoría de ellos solares y una pequeña cantidad de eólicos.
En Andorra, Endesa va a invertir más de 1.487 millones de euros en renovables y allí ha dicho que se creará "la mayor planta solar europea" en construcción, con 1.585 MW fotovoltaicos, a los que hay que sumar casi 140 eólicos y un sistema de almacenamiento de hasta 159,3 MW.
Asimismo, el plan de futuro de Andorra, que contempla la sincronización del calendario de cierre con el de la construcción de nueva potencia renovable en las inmediaciones de la central -que actualmente tiene 147 trabajadores- prevé que se generen unos 700 empleos al año hasta 2026 y en los siguientes 25 años se mantendrían unos 120 empleos en tareas de operación y mantenimiento.
En el caso de la central de Compostilla, que tiene 1.052 MW de potencia instalada y 147 empleados en la actualidad, no se podrá instalar tanta renovable como en Andorra y se prevé la construcción de 390 MW renovables.
Allí se generarán más de mil empleos en la fase de construcción y 30 puestos de trabajo en la de operación y mantenimiento.