Pekín, 13 dic (EFECOM).- El Gobierno chino aseguró hoy que está "comprometido" a llegar a un acuerdo que mitigue su conflicto comercial con Estados Unidos siempre y cuando sea "mutuamente beneficioso".
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hua Chunying, no confirmó que las dos partes hayan llegado ya a un pacto, pero destacó el hecho de que las bolsas de Estados Unidos y Europa subieran después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, dijera en redes sociales que el acuerdo está "muy cerca".
"Las subidas muestran que un acuerdo al que se llegue a través de la negociación es beneficioso para las dos partes, y es lo que la comunidad internacional quiere. China está comprometida a dialogar para resolver las diferencias. Creemos que la negociación debe basarse en la igualdad y el respeto, y que el acuerdo sea mutuamente beneficioso", dijo hoy Hua en rueda de prensa.
Entre los mercados bursátiles que subieron después de que Trump avanzara progresos en las negociaciones se encuentra el de Hong Kong, cuyo índice referencial, el Hang Seng, cerró hoy con fuertes ganancias del 2,57 %, al igual que el Nikkei de Tokio, que acabó con un avance del 2,55 % y superó los 24.000 puntos por primera vez desde hace más de un año.
Las delegaciones de China y EEUU negocian un acuerdo para mitigar su conflicto comercial antes de este domingo, fecha en la que está prevista la entrada en vigor de aranceles estadounidenses por valor de 160.000 millones de dólares (143.701 millones de euros).
El Ministerio chino de Comercio, que este jueves aseguró que las delegaciones están "permanentemente en contacto", afirmó en noviembre que había llegado a un acuerdo con Washington para retirar por fases los gravámenes que ambas partes se han ido imponiendo durante la disputa.
La llamada "primera fase" del acuerdo implicaría la reducción de aranceles por parte de Estados Unidos a cambio de que China aumentara sus compras de productos agrícolas estadounidenses hasta llegar a entre 40.000 y 50.000 millones de dólares, según expertos y medios locales.
No obstante, no trataría otros temas espinosos como la transferencia forzada de tecnología en China, que se abordaría en la "segunda fase".
El último episodio de la guerra comercial se produjo el pasado 1 de septiembre con la entrada en vigor del aumento del 10 al 15 % desde Washington sobre algunas importaciones chinas por valor de 112.000 millones de dólares.