Torrelavega (Cantabria), 3 ene (EFECOM).- La asamblea de trabajadores de Sniace ha aceptado hoy, viernes, por mayoría, la última propuesta de la empresa para llevar a cabo un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) abierto para la mitad de la plantilla de un año de duración, con un máximo de 91 días laborales por cada empleado.
El ERTE se comenzará a aplicar a partir del próximo mes de abril, de forma que, de las 13 semanas que como máximo cada trabajador permanecerá en el desempleo, cinco de ellas serán inmediatamente anteriores a la parada de mantenimiento (4 al 24 de mayo), lo que supone el 450 % del tiempo de regulación de empleo.
A su vez, las restantes semanas serán ejecutadas por el grupo químico en función de la situación productiva a lo largo de todo el 2020, sin que ello suponga el devengo de vacaciones durante los periodos de suspensión ni derecho económico alguno por los trabajadores suspendidos.
La propuesta aceptada por la plantilla posibilita a la empresa fijar el 60 % de las vacaciones de cada operario, mientras que el resto serán decididas por cada trabajador en subordinación a las fijadas por Sniace de acuerdo con el calendario de suspensiones.
Además, los descansos suplementarios serán fijados por la empresa, teniendo como objetivo cubrir toda la parada de mantenimiento con días de vacaciones y descansos suplementarios, y se programarán, de acuerdo con el comité de empresa, los posibles cursos de formación a desarrollar por los trabajadores suspendidos.
Esta oferta fue presentada por la empresa a primera hora de hoy durante la tercera y última reunión negociadora y una vez ratificada por los trabajadores en la asamblea celebrada en la tarde-noche de hoy se concretará en un documento que ambas partes -Sniace y sindicatos- trasladaran a la Dirección General de Trabajo.
En el transcurso de la asamblea, algunos trabajadores calificaron esta propuesta de Sniace como "chantaje" ya que, según ha explicado el comité, en caso no haber sido aceptada la dirección de la empresa aplicará un ERTE con la oferta inicial, que suponía un máximo de 20 semanas de desempleo por cada operario.
Además, se ha criticado la falta de concreción de aspectos como el número de paradas de la producción y las fechas en las que se pretenden llevar a cabo, ya que la dirección se reserva esta posibilidad en función del comportamiento de los mercados de la celulosa, de los pedidos que reciba y de los precios del producto.
Asimismo, se ha denunciado la "falta de talante negociador" de la dirección de Sniace, ya que ha rechazado "de forma sistemática" las propuestas presentadas por el comité, que sin afectar a los planes de la compañía pretendían no perjudicar los intereses sociales y económicos de la plantilla.
Por su parte, la dirección de Sniace ha detallado este viernes en un comunicado que mantiene "una actitud colaboradora con los trabajadores" para adaptar la actividad de la compañía a las condiciones competitivas de los mercados y mantener el plan de inversiones anunciando.