Buenos Aires, 7 ene (EFECOM).- Las empresas o personas que adquieran divisas extranjeras en Argentina destinadas al pago de obligaciones de deuda no tendrán que abonar el impuesto del 30 % a las operaciones en el mercado de cambios, según la resolución publicada este martes en el Boletín Oficial.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) estableció en la resolución 4659/2020 que el denominado Impuesto para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAÍS) se aplica a la compra de divisas en moneda extranjera para atesoramiento, o destinadas al pago de determinadas operaciones fuera del país que los sujetos residentes en Argentina cancelen mediante tarjeta de crédito, de compras, de débito u otros medios de pago.
El gravamen solidario también se aplica a la adquisición de servicios en el exterior contratados a través de agencias de turismo, de billetes de transporte de pasajeros con destino fuera del país y de servicios digitales.
Sin embargo, "no quedarán sujetas a percepción las operaciones con destino específico vinculadas al pago de obligaciones, de conformidad con las pautas establecidas por el Banco Central de la República Argentina (BCRA)", puntualizó la AFIP en el Boletín Oficial.
Por otra parte, la resolución oficial advierte de que quienes hayan adquirido servicios o billetes de transporte al extranjero desde el 28 de diciembre, cuando entró en vigencia la ley, y no se les haya cobrado el impuesto del 30 %, o se les haya cobrado de manera parcial o incorrecta, deberán abonarlo directamente a la AFIP.
El impuesto PAÍS integra el paquete de medidas dispuesto por el nuevo Gobierno del peronista Alberto Fernández en la denominada ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva para hacer frente a la crisis económica y social que atraviesa Argentina, en recesión desde abril de 2018.
La ley dispone que el 70 % de lo recaudado por el impuesto PAÍS será destinado a solventar fondos de la seguridad social y el 30 % restante a financiar obras de infraestructura y vivienda.
La medida endurece el cepo a las operaciones con moneda extranjera que ya había impuesto el Gobierno del conservador Mauricio Macri (2015-2019) en sus últimos meses de gestión, al fijar una restricción de compra a un máximo de 200 dólares por mes.
Fernández declaró que "la gente se enoja por el impuesto al dólar, pero el dólar en Argentina es un bien".