La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha decidido revisar los criterios que mantenía desde 2013 sobre la negociación que pueden emprender las empresas cotizadas con acciones propias (autocartera) con la finalidad de implantar un sistema que adapte la normativa europea a criterios restrictivos y encaminado a satisfacer solo programas de recompra y la cobertura de contratos de liquidez.
Así, de acuerdo con una notificación titulada "comunicado de la CNMV dejando sin efecto los criterios sobre operativa discrecional de autocartera de 2013", el organismo supervisor ha reconocido que "toda operativa de autocartera entraña un riesgo para la integridad del mercado, lo que hace razonable un enfoque restrictivo en este ámbito".
Por ello, propone a las empresas que vayan a actuar en el mercado con acciones propias que limiten "el régimen de puerto seguro a los dos casos que ofrece el Reglamento". Es decir, la finalidad del programa sólo puede ser la amortización de las acciones o reducción del capital del emisor, el cumplimiento de obligaciones inherentes a los instrumentos financieros de deuda convertibles en acciones o el cumplimiento de obligaciones derivadas de planes de opciones sobre acciones de empleados.
También goza de protección en términos de puerto seguro la operativa de autocartera que se desarrolle al amparo de una práctica de mercado aceptada en los términos en los que ésta se recoge en el reglamento y siempre que las operaciones se realizaran por motivos legítimos.
El organismo presidido por Sebastián Albella recuerda que las operativas con acciones propias que se aparten de lo previsto en las disposiciones del reglamento estarán sujeta a cualesquiera actuaciones para comprobar el cumplimiento de la prohibición de manipulación de mercado o de uso de información privilegiada.