Palma, 21 ene (EFECOM).- Los alcaldes de Palma, José Hila; Sevilla, Juan Espadas, y de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, han coincidido este martes en la necesidad de una regulación del alquiler de uso turístico para evitar problemas de convivencia con los residentes.
En el X Foro Exceltur que se celebra en Madrid, previo a la inauguración de Fitur, el alcalde de Palma ha explicado que la capital balear reguló el alquiler la pasada legislatura prohibiéndolo en viviendas plurifamiliares: "Ya no apostamos por crecer en cantidad sino en calidad y por un turismo cívico, respetuoso con el destino", ha asegurado.
En Madrid no hay "graves problemas de convivencia" por lo que el alquiler turístico no es problemático ni una cuestión candente, según el alcalde, "pero sí hay que abordar las viviendas de usos turísticos", ha precisado.
"Exige una reflexión en torno a si es el modelo que queremos y los problemas de convivencia", ha pedido Martínez-Almeida, quien ha abogado por "una regulación adecuada, equilibrada y objetiva de las viviendas de uso turístico" para "poner cierto coto a la situación que se está produciendo de descontrol".
Ha añadido que el ayuntamiento ha clausurado en los últimos meses más de 300 viviendas de uso turístico que estaban funcionando de manera ilegal y ha reivindicado que esta cuestión la aborden de forma conjunta todas las administraciones: "Los ayuntamientos no somos los únicos que debemos afrontar este carga de regulación", ha afirmado.
En Sevilla, de un 14 % de pisos vacíos hace 4 o 5 años, la ciudad ha pasado a alrededor de un 7 %, y en el centro de la ciudad ha habido inversión en varios inmuebles para generar alojamiento turístico, ha explicado su alcalde.
Juan Espadas ha explicado que el alquiler turístico "no ha expulsado de manera importante a residentes ni vecinos del casco antiguo y no se ha generado tensión", pero "debería ser objetivo de un control o regulación para evitar efectos negativos de exceso de carga en puntos muy concretos de la ciudad".
Desde puntos de vista distintos, los tres alcaldes han abogado por un turismo sostenible como reto de futuro.
El alcalde de Palma, ciudad de 420.000 habitantes con 9 millones de turistas, ha defendido las limitaciones impuestas por el ayuntamiento en el alquiler vacacional y la apertura de hoteles y que continuará en los cruceros.
El de Madrid, ha dicho que con entre 10 y 11 millones de turistas en una ciudad de 3,2 millones de habitantes, quiere "un modelo que sea de calidad y sostenible" y que active la economía "pero que la ciudad lo pueda soportar".
En Sevilla, que presenta un crecimiento entorno al 5 o 6 % y que ha duplicado los pasajeros del aeropuerto en 5 años, el alcalde cree que el crecimiento debe producirse minimizando los efectos negativos.
"No podemos ver el turismo como un peligro o un problema, no debemos dar ese enfoque, sino el de ser capaces, con el sector, de ordenar determinados procesos", ha dicho Espadas, partidario de "ordenar los flujos para evitar concentraciones en las que el visitante tenga una experiencia menos satisfactoria".