El Gobierno de Australia advirtió este jueves sobre el impacto "significativo" que sufrirá su economía a raíz de la expansión del nuevo coronavirus, procedente de China, su principal socio comercial.

El ministro del Tesoro, Josh Frydenberg, indicó durante una entrevista a Channel Nine que "la economía australiana sufrirá un impacto significativo" sin especificar una cifra y que su trabajo es "mitigar el daño que sufrirá la economía y que no tenga efectos a largo plazo".

Frydenberg destacó que entre los sectores que se verán afectados estará la educación, ya que en australia hay 200.000 estudiantes procedentes de China, y el turismo, con unos 1,4 millones de visitantes anuales procedente del país asiático.

En un informe publicado este miércoles por el banco ANZ, los expertos prevén que la economía australiana, que no registra pérdidas trimestrales desde 2011, baje el 0,1 % durante el primer trimestre de 2020, entre otras razones por el impacto del coronavirus.

"El impacto económico del virus es debido a las medidas tomadas para limitar la propagación. La prohibición de viajes para todos los extranjeros que han estado en China, así como las cancelaciones de aerolíneas, se traducen en una drástica reducción del turismo", apuntó el banco, que, según su estimación, el impacto del coronavirus supondrá una bajada de 0,5 puntos en el primer trimestre.

No obstante, el ANZ augura que la economía australiana retorne al signo positivo en el segundo trimestre debido a un "repunte de llegadas procedentes de China" y mantendrá los números verdes en el tercero y cuarto.

"En consecuencia, es probable que el impacto en el crecimiento a finales de año sea pequeño", señala el informe.

China es el socio comercial más importante de Australia y destino para cerca de un tercio de las exportaciones de los productos australianos, mientras que turismo y los estudiantes chinos representan alrededor del 0,9 % del PIB o 2.000 millones de dólares australianos (1.350 millones de dólares estadounidenses o 1.230 millones de euros) anuales en el país oceánico.

Según los expertos, la economía también se verá afectada este año por los efectos de la sequía y los incendios forestales que sufre el país, a pesar de que el Ejecutivo ya ha aprobado una batería de medidas económicas para minimizar el impacto.