Washington, 7 feb (EFECOM).- El índice de desempleo en Estados Unidos (EEUU) subió en enero pasado una décima, hasta el 3,6 %, a pesar de la creación de 225.000 nuevos empleos, informó este viernes el Departamento de Trabajo.
La economía estadounidense, que continúa en cifras cercanas al pleno empleo, con la creación de estos 225.000 nuevos puestos de trabajo superó los 164.000 que preveían los analistas.
El informe del Gobierno ajustó también los datos correspondientes a 2019, e indicó que en todo ese ejercicio se crearon 2,09 millones de empleos, por debajo de los 2,11 millones calculados anteriormente y divulgados hace un mes.
De todos modos, el 2019 fue el noveno año consecutivo en el que superan los 2 millones de nuevos puestos de trabajo creados, con lo que el desempleo se mantiene en su nivel más bajo en medio siglo.
El incremento del índice en enero refleja un mayor número de personas que han ingresado al mercado laboral en busca de empleo.
El sector del cuidado de la salud junto al de hoteles y restaurantes crearon 36.000 empleos el mes pasado, en tanto que el sector fabril perdió 12.000 puestos de trabajo y continúa con dificultades, relacionadas con las disputas comerciales con China, que erosionaron las exportaciones en 2019.
La mayor economía del mundo, que mantiene su crecimiento lento pero ininterrumpido durante diez años y medio, ha añadido un promedio de 211.000 empleos en los tres meses pasados, una aceleración de contratos si se compara con los datos de los seis meses anteriores.
Las remuneraciones de los trabajadores subieron en enero en 7 centavos, hasta los 28,44 dólares por hora. En los últimos 12 meses las remuneraciones han aumentado un 3,1 %, mientras que la tasa de participación laboral subió del 63,2 % al 63,4 %.
El índice de desempleo es uno de los elementos más favorables de la economía estadounidense, cuyo crecimiento se ralentizó en todo 2029 hasta el 2,3 %, por debajo del 2,9 % de 2018, lo que supone el menor ritmo desde la llegada del presidente Donald Trump a la Casa Blanca a comienzos de 2017.
El mercado laboral estadounidense, que alcanzó un índice de desempleo del 10 % en octubre de 2009, cuando la economía llevaba apenas tres meses recuperándose de la Gran Recesión, tenía un índice de desempleo del 5 % al comienzo de la gestión del presidente Trump y ha mantenido su bonanza durante estos tres años.
Si bien ésta es la expansión económica más larga en la historia del país, algunos analistas consideran que no podrá crecer más rápido si los sueldos de los trabajadores no aumentan más rápido también.
Los datos divulgados por el Departamento de Comercio, en la primera de sus tres estimaciones, indican que la actividad económica estadounidense creció a un ritmo anual del 2,1 % en el último trimestre del año.
Con estos datos, se confirma la progresiva desaceleración económica en EEUU, la primera economía mundial que comenzó el año con una tasa anual de expansión por encima del 3 %.
La semana pasada, la Reserva Federal estadounidense (Fed) mantuvo los tipos de interés en el mismo rango, de entre el 1,5 % y el 1,75 %, y mostró un "cauto optimismo" al asegurar que es la política "apropiada" para mantener la expansión, pese a las reiteradas presiones del presidente Trump para bajar el precio del dinero.