Pedir comida a domicilio o hacer la compra a distancia son prácticas cada vez más habituales en nuestro estilo de vida. Para aquellos que no tienen mucho tiempo libre, empresas como Glovo ofrecen la posibilidad de recoger y enviar cualquier producto a la dirección elegida por el cliente. Pero ¿cómo cambia el servicio cuando hay mucho tráfico u otras aglomeraciones en el centro de la ciudad?
Para dar respuesta a estas y otras preguntas, la compañía Glovo ha diseñado un algoritmo que permite a los repartidores prestar sus servicios de manera segura y generar mayores ingresos. El método utilizado es el cálculo de los tiempos de preparación del pedido (basados en el historial de cada establecimiento), así como los plazos de entrega en función del vehículo utilizado por el repartidor. Estos valores están integrados en Jarvis, el algoritmo informático que también tiene en cuenta factores externos como la meteorología, el tráfico o las calles cortadas.
De esta forma, los colaboradores de Glovo reducen a la mitad el tiempo de espera del pedido y pueden tomar la mejor ruta, lo que se traduce en un aumento de la eficiencia y la posibilidad de hacer más entregas. El resultado en el último año ha sido el incremento de los ingresos de los repartidores en un 12% y la mejora de los tiempos de espera en un 10%.
En cuanto a la seguridad, la plataforma también incluye en su algoritmo las zonas peligrosas de la ciudad o las manifestaciones convocadas, para que los colaboradores puedan evitarlas y repartir con tranquilidad. El algoritmo actualiza los datos cada pocos segundos durante las 24 horas del día y está activo en las más de 300 ciudades en las que Glovo está presente.
La estacionalidad y los días festivos son otros de los factores que contempla Jarvis optimizando la asignación automática de pedidos a repartidores. Un trabajo desarrollado por ingenieros, data scientists y data analysts que beneficia a repartidores, usuarios y establecimientos; los tres pilares de Glovo.
Más cobertura sanitaria para los colaboradores de Glovo
Además de optimizar el algoritmo que hace más seguros los trayectos de los repartidores, la compañía Glovo ha ampliado las coberturas del seguro de los colaboradores con la aseguradora Chubb. Dicha ampliación se aplica sobre el seguro que ya tenía contratado Glovo desde hace dos años y conlleva mejoras como la cobertura sanitaria de los colaboradores en caso de lesión por accidente mientras reparten.
Con este acuerdo, los repartidores autónomos serán indemnizados y sus gastos médicos reembolsados. Chubb se hará cargo del coste de los tratamientos y la asistencia sanitaria que requiera el trabajador, además de ayuda económica para el desplazamiento de un familiar en caso de hospitalización. Otra de las coberturas que se ha incluido en la póliza es la protección de los ingresos de los colaboradores autónomos para los casos de incapacidad temporal derivados de un accidente acontecido mientras desempeñaban su actividad profesional.
“Para nosotros, la seguridad de los repartidores, al igual que la de todos los usuarios, siempre ha sido una prioridad. Con estas nuevas coberturas aumentamos su protección durante el desarrollo de su actividad profesional” afirma Diego Nouet, director general de Glovo Iberia.
Las medidas de protección contratadas recientemente por Glovo se suman a las que ya recibían los inscritos en la app, pues todos los contratos que vinculan a los repartidores con la plataforma incluyen un anexo con la normativa vial.