La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, se reunirá este viernes con las principales organizaciones sindicales, CCOO y UGT, para tratar la vuelta a la actividad económica, pero la patronal no asistirá a esta reunión telemática.
Según han confirmado fuentes del Gobierno, la reunión había sido pedida también por los agentes sociales para tratar la vuelta al trabajo, pero no solo de las actividades que regresan el lunes, sino para ir analizando también la desescalada del conjunto de la economía.
A esta reunión también estaba convocadas las patronales CEOE y Cepyme, pero ayer ambas denunciaron, en un comunicado, que "en ningún momento" se les había hecho partícipes de la negociación de un nuevo ingreso mínimo vital puente, que anunció la vicepresidencia de Asuntos Sociales, y que esta iniciativa no se había sometido a discusión en el diálogo social.
Por todo ello y ante este monumental enfado, ambas patronales indicaron que no asistirían a la reunión de este viernes. "En estas condiciones, se hace imposible participar mañana viernes, 10 de abril, en la reunión a la que han sido convocados por el Ministerio de Trabajo", rezaba el comunicado.
Asimismo, CEOE y Cepyme añadían que, "ante la manipulación interesada y la deslealtad al diálogo social y a los empresarios españoles", se sentían "presionados" para dar su apoyo a una propuesta de partido, "que nada tiene que ver con un acuerdo consensuado en lo que debería ser el cauce habitual con los interlocutores sociales, que formamos parte de la mesa de diálogo y que siempre hemos estado de acuerdo en no dejar a nadie atrás en esta crisis".
En este contexto, la reunión que mantendrá hoy Yolanda Díaz con los sindicatos abordará la deshibernación de la economía española, toda vez que las actividades no esenciales vuelven a la actividad este mismo lunes, una vez finalizado el permiso retribuido recuperable.
Con el fin de dicho permiso, una medida calificada por el Gobierno como "extraordinariamente efectiva" para reducir los niveles de movilidad a los de los fines de semana, concluye la "hibernación" de la economía y dejará de estar restringida la movilidad para el desplazamiento al lugar de trabajo para efectuar prestaciones laborales, profesionales o empresariales de actividades no esenciales.
De esta forma, la mayoría de los trabajadores de actividades no esenciales volverán a sus puestos de trabajo este lunes de Pascua, salvo en las comunidades en las que es festivo (Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Cataluña, La Rioja, Navarra y País Vasco).
A su vez, los trabajadores de servicios esenciales, como el personal sanitario, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Ejército, los servicios de transporte o los supermercados continuarán desarrollando su actividad con normalidad, como han hecho hasta ahora.
Así, a partir de este próximo lunes se vuelve a la situación de los primeros 15 días del estado de alarma, por lo que volverán a reincorporarse los trabajadores de actividades no esenciales, como la construcción, pero se mantienen los protocolos del carácter preferente del trabajo a distancia y el teletrabajo cuando se pueda desarrollar de esa forma, junto a las medidas de protección e higiene.
Diversas reuniones
El Ejecutivo y los agentes sociales se han reunido a lo largo de la semana para continuar trabajando en la denominada fase de desescalada de las medidas de confinamiento y estudiar cómo se puede ir retomando la actividad atendiendo a las particularidades de cada sector, una vez finalice la Semana Santa.
Durante estos encuentros, las organizaciones sindicales trasladaron al Ejecutivo la necesidad de ir preparando a empresas y sectores para que se cumpla con la seguridad y los distintos protocolos cuando se reactive la actividad. Así, dejaron claro que se debía seguir trabajando en estos protocolos de seguridad, que ya existen en algunos sectores, pero que faltan en otros tantos.
El líder de CCOO, Unai Sordo, instó al Gobierno en la reunión del lunes a que siguiese protegiendo a los colectivos de ciudadanos que siguen sin tener ningún tipo de protección económica, que han sido despedidos y que no tienen acceso a ninguna prestación por desempleo ni subsidio.
Por su parte, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, pidió al Gobierno que garantizasen las medidas y los equipos de protección a los trabajadores antes de que reinicien su actividad a partir del próximo lunes.
Por ello, propuso la puesta en marcha "inmediata" de las mesas de negociación con los agentes sociales a nivel sectorial para diseñar medidas y normas que se ajusten a los sectores y que estén en línea con las normas dictadas para combatir la pandemia. De hecho, pidió que se elaboren guías de seguridad y salud específicas para estos sectores que retomarán su actividad una vez pase la Semana Santa.