El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha instado al Gobierno a estudiar muy bien las medidas a adoptar para que cuando se inicie con la desescalada, "las empresas no se vean obligadas a cerrar".
"Nos parece fundamental que este proceso de hibernación y desescalada a partir del 26 de abril se haga de manera muy ordenada", ha expresado. Desde UGT han solicitado que se procuren "nuevos ERTE más ágiles o un retorno de los mismos más flexible" que ayuden a las empresas a salir del bache económico. "Los ERTE por fuerza mayor no tienen que pagar el 10% de los costes, por ejemplo", ha sugerido en una entrevista en Intereconomía.
Álvarez, además, ha recordado que en España hay "un millón de personas confinadas en sus casas que no tienen ningún ingreso ni prestación pública". El secretario se ha referido a las personas que "viven al día" por la economía sumergida y para las que la propuesta de renta mínima vital será importantísima. "No va a ser una ley fácil pero este mínimo vital lo tienen que aprobar cuanto antes. España puede y debe hacerlo", ha señalado.
Al respecto de la deshibernación, Pepe Álvarez ha confirmado que en efecto, "no hay equipos de protección" suficientes para todas las empresas que debían ir incorporándose a la actividad desde ayer. "El mercado de compra internacional está como está"y conseguir EPIs es complicado. Así, "las empresas tienen que ser conscientes deque tienen una gran responsabilidad para que los trabajadores puedan trabajar en unas condiciones de separación suficientes y si tienen un caso de coronavirus que no lo oculten y llamen a desinfección", ha señalado.
No obstante, el de UGT ha puesto también el foco de la responsabilidad en los propios trabajadores pidiéndoles que no acudan a trabajar si consideran que las condiciones de protección en sus empresas no son las óptimas. "Esto lo tenemos que parar entre todos", ha manifestado.