El Foro Económico Mundial ha decidido aplazar su próximo encuentro anual en la localidad suiza de Davos hasta principios del próximo verano a consecuencia de la incierta evolución de la variante ómicron de la Covid-19. Hasta ahora, esta edición estaba prevista para los días 17 al 21 de enero.
La organización del encuentro ha explicado en un comunicado que "las condiciones actuales de la pandemia hacen que sea extremadamente difícil ofrecer una reunión global en persona". A pesar de los estrictos protocolos de salud establecidos para la reunión, han justificado que "la transmisibilidad de ómicron y su impacto en los viajes y la movilidad han hecho necesario el aplazamiento".
En un formato similar al de este 2021, los organizadores han indicado que los participantes tomarán parte en una serie de sesiones que versarán sobre el estado del mundo y que reunirán virtualmente a líderes mundiales para tratar de dar forma a soluciones para los desafíos globales más urgentes.
El precedente de 2021
En este sentido, se trata del segundo año consecutivo en el que el Foro de Davos ve truncada su tradicional reunión a comienzos de año. Un encuentro en el que se participan las élites políticas, académicas y económicas. En este 2021, la cumbre fue inicialmente trasladada hasta Singapur, después se retrasó y finalmente se canceló en su formato habitual.
A pesar de todo, Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, señaló que "el aplazamiento no impedirá el progreso a través de la convocatoria digital continua de líderes empresariales, gobiernos y la sociedad civil". Del mismo modo subrayó que "la cooperación público-privada -uno de los objetivos del Foro- ha avanzado a lo largo de la pandemia y continuará a buen ritmo".