La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha alertado este lunes de que los próximos trimestres "van a ser complejos" ante un escenario de inflación "más persistente y elevada" de la prevista y ha avanzado que reunirá este miércoles a agentes sociales para volver a abordar el pacto de rentas.
La vicepresidenta ha descartado, no obstante, la posibilidad de que en los próximos trimestres la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) sea negativa, según ha señalado a los medios tras la octava reunión del Consejo Asesor de Economía.
Ante este escenario, Calviño ha remarcado la "importancia y conveniencia" de que los agentes sociales puedan acordar un pacto de rentas para proporcionar "confianza y estabilidad" a los trabajadores, empresas y el conjunto de la sociedad.
[Se necesita un gran pacto de rentas para vencer a la hiperinflación]
Así, en la reunión del miércoles, el Gobierno tratará de impulsar, apoyar y encauzar ese diálogo entre empresas y trabajadores para contribuir a ese pacto de rentas que permita seguir afrontando los retos actuales y, en particular, los derivados del alza de los precios a nivel internacional.
"La guerra nos hace a todos más pobres y es muy importante garantizar un reparto justo de su coste", ha señalado Calviño tras defender que las medidas puestas en marcha por parte del Gobierno están permitiendo contener la inflación. Eso si, ha reconocido que, junto a la energía, hay una creciente preocupación por parte de los expertos en cuanto a la subida de precios de los alimentos.
Por ello, la titular económica del Gobierno ha defendido que España haya movilizado un volumen "sin precedentes" de recursos superior al 1% del PIB solo con las medidas adoptadas en 2022, que están permitiendo contener alza de precios en 3,5 puntos porcentuales.
La vicepresidenta ha asegurado, no obstante, que durante la reunión, los expertos han constatado que economía española mantiene un fuerte crecimiento incluso en este contexto internacional de "máxima incertidumbre" por la guerra en Ucrania, las tensiones geopolíticas, la normalización de la política monetaria, las disrupciones de las cadenas de suministro globales y la inflación.