La tasa de inflación interanual de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se situó el pasado mes de mayo en el 9,6%, cuatro décimas más que en abril. Esta cifra supone la mayor subida de los precios entre las economías avanzadas desde agosto de 1988, según ha informado la institución.
El incremento de los precios en mayo respondió al encarecimiento del 12,6% de los alimentos, frente al 11,5% del mes anterior, mientras que la subida de la energía fue del 35,4%, frente al 32,9% en abril.
De este modo, al excluir la volatilidad de la energía y de los alimentos, la tasa de inflación subyacente de la OCDE se situó en mayo en el 6,4%, dos décimas más que el mes anterior.
Entre los países de la OCDE, las mayores tasas de inflación se observaron en mayo en Turquía (73,5%), por delante de Estonia (20%) y de Lituania (18,9%), mientras que las subidas menos intensas se registraron en Suiza (2,9%), Israel (4,1%) y Francia (5,2%).
Cabe recordar que la inflación en la zona euro fue del 8,1 % en mayo (muy similar a la española del 8,3%) y en los países del G7 alcanzó un 7,5 %.
Entre los países del G7, EEUU registró un 8,6 %, con aumentos menores en el Reino Unido (7,9), Alemania (7,9), Canadá (7,7), Italia (6,8), Francia (5,2) y Japón (2,5 %).