La inflación interanual en Alemania repuntó al 7,9% en el mes de agosto, cuatro décimas más, a pesar de las medidas de apoyo a los ingresos de los hogares que ha puesto en marcha el Gobierno del país, según se desprende de los datos definitivos publicados este martes por Destatis, la oficina de estadística germana.
El dato de inflación confirma la primera estimación publicada hace dos semanas. El incremento del 7,9% es el mayor desde el mes de mayo, cuando se registró esa misma cifra.
La tasa del quinto mes del año fue la más elevada de toda la serie histórica, que se inició en 1991 tras la reunificación del país, y la mayor subida de los precios desde finales de 1973 en la antigua Alemania Federal.
Incremento de los alimentos
Por su parte, a tasa de inflación armonizada se situó en el 8,8%, lo que supone un incremento de tres décimas en comparación con el séptimo mes del año.
"Las principales razones de la elevada inflación aún son los incrementos en productos energéticos y alimentos. Dos medidas del paquete de ayuda tuvieron un ligero efecto a la baja en la tasa de inflación, especialmente de junio a agosto de 2022: el billete de 9 euros y el descuento de combustible", ha subrayado el presidente de Destatis, Georg Thiel.
Esas dos medidas han tenido un impacto a la baja en los precios del transporte, que se elevaron un 3,7% en el mes de agosto, frente al 5,4% de julio y al 8,3% de junio. En mayo, el incremento fue del 16,3%. Asimismo, la abolición de las primas a las renovables de la factura de la luz redujo el coste de la electricidad en 3,7 céntimos por kilovatio hora (kWh), lo que ha ayudado a amortiguar la subida del precio de la luz.
En agosto, la energía se encareció un 35,6% frente a un año antes, una décima menos que en julio. El combustible para calefacción duplicó su precio frente a agosto de 2021, con un alza del 111,5%, mientras que el gas natural se encareció un 83,8%. Los precios de la electricidad subieron un 16,6%.
Los precios de los alimentos registraron una escalada del 16,6%, casi dos puntos más que el incremento interanual del mes pasado. Destaca el aceite, que elevó su precio un 44,5%, mientras que los lácteos y huevos se encarecieron un 26,8%; la carne, un 18,6%; y el pan y los cereales, un 17,1%.
Sin tener en cuenta los precios energéticos y de los alimentos, la tasa de inflación subyacente de Alemania se situó en el 3,5% en el mes de agosto, tres décimas más que el mes anterior.