El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado este lunes un nuevo análisis de los precios (IPC), en este caso la evaluación correspondiente a enero, que marca un incremento de la inflación el 5,8%. Pero el dato no es la única novedad: el ente dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos ha llevado a cabo importantes cambios en la metodología de cómo se miden los precios.
Finalmente, el INE ha incluido las tarifas del mercado libre de la electricidad y del gas. Se trata de una operación que se había dilatado durante todo 2022 y que por fin se ha puesto en marcha.
"El INE agradece la colaboración de las compañías, cuyo trabajo ha sido esencial para poder desarrollar el método idóneo para incorporar el mercado libre en ambos sectores", indica el ente, en un comunicado. "Cabe señalar que esta incorporación de los mercados libres de la electricidad y el gas en el cálculo del IPC cuenta con el respaldo de Eurostat, la oficina estadística de la UE".
El otro cambio tiene que ver con el peso que tiene cada uno de los elementos en el IPC. El INE ha rebajado la importancia que tienen dos de los que más han contribuido a elevar la inflación y, al mismo tiempo, a atenuarla en los últimos meses: alimentos (que pasa de un peso del 22,6% a uno del 19,6%) y vivienda (que pasa del 14,2% al 12,7%), que incluye el impacto de los precios de la energía.
El INE asegura que este cambio se hace de manera anual. "Cada año se actualiza el peso o importancia de sus componentes, lo que mantiene la actualidad del mismo. Además, cada cinco años se actualiza la estructura completa para todos los niveles de desagregación".
Para hacer esta revisión, el INE ha usado datos procedentes de la Contabilidad Nacional, adaptándose a "los criterios establecidos por la reglamentación europea".
De esta manera, pierden peso tanto el elemento que más disparaba los precios como el que más los atenuaba (dado que vivienda aglutina todo lo relacionado con energía). Con todo, siguen siendo dos de los elementos con más importancia en el cálculo de la inflación.
También pierde mucho peso vestido y calzado, que pasa de un peso del 6% al 3,9%. Mientras, ganan importancia medicina (más de punto y medio, hasta el 6%), transporte (que se coloca como el segundo elemento con más peso del INE), ocio y bebidas alcohólicas.
El cambio está siendo polémico en las redes sociales. No tanto por las modificaciones en sí mismos, sino por no haber informado previamente de la reforma.
Este es el caso del exministro de Industria y economista Miguel Sebastián, que ha reclamado al INE que indique cuál sería el IPC que se obtendría con la metodología de 2022.
"Este cambio metodológico se debería anunciar antes de publicar el dato. Los datos no son vuestros, son de los ciudadanos", ha indicado mediante su perfil de Twitter. "Hacéis el cambio justo cuando la PVPC baja intensamente, pero la tarifa libre sube. Cuando la PVPC subía intensamente y la libre no, no lo cambiasteis".
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