La acuicultura española es líder en producción dentro de la UE y logra la medalla de plata en cuanto a valor. Es una de las principales conclusiones de la Memoria de Sostenibilidad bienal del proyecto Acuicultura de España, que aglutina al sector y que reivindica sus posibilidades para abastecer a la población de proteínas animales sin comprometer recursos naturales.

De acuerdo con el documento, en el que participan 19 empresas que representan al 80% de la producción nacional, España se sitúa a la cabeza de la producción de acuicultura de la UE en volumen, con 327.309 toneladas y en segundo lugar en valor (629 M€). 

Son datos correspondientes a 2021. El informe indica además que por especies, el mejillón es la de mayor producción (255.303 toneladas), seguido de la lubina (23.924 toneladas), la trucha arcoíris (15.357 toneladas) y la dorada (9.632 toneladas).

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La memoria describe además cómo ha sido la evolución de los índices de sostenibilidad y los grandes hitos alcanzados en este periodo. Comparados con la producción de carne, reflejan grandes diferencias.

Por ejemplo, que la media de pienso para producir un kg de pescado de acuicultura está en 1,78 kg de media; mientras que, en la producción vacuna son necesarios hasta 10 kg y; en la ganadería porcina, hasta 5 Kg.

Por otro lado, la huella de carbono indica que la lubina de acuicultura produce 2,4 kg de CO2, equivalente generado por la producción de un kg de pescado fresco, mientras que la producción de un kg de vacuno genera 15 veces más (36 kg de CO2).

Y finalmente, el índice FIFO (Fish In/Fish Out) "pone de manifiesto que el sector está avanzando en cuanto a la reducción del uso de pescado procedente de la pesca extractiva en la producción de piensos de los peces de cultivo", afirman.

Datos con los que el sector saca pecho y se reivindica como la solución para obtener alimentos con alta proteína animal sin comprometer la sostenibilidad.

“Este sector es estratégico para nuestro país porque promueve una alimentación más sostenible para toda la sociedad, al mismo tiempo que genera grandes oportunidades de crecimiento económico y social a nivel local con el menor impacto medioambiental posible”, ha remarcado Javier Ojeda, gerente de APROMAR (Asociación Empresarial de Acuicultura de España).

El sector asegura que persigue "un objetivo común", extender el consumo de pescado a todas las mesas haciéndolo más accesible. A este respecto ha subrayado la paradoja de que en un planeta cuya superficie es 70% agua se extraiga el 98% de sus alimentos del restante 30% de superficie terrestre.