El Banco Central Europeo (BCE) incrementó la semana pasada sus compras de deuda en el marco del Programa de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP, por sus siglas en inglés). hasta los 18.200 millones de euros. Esto supone un 7,7% más que la semana anterior, en pleno repunte de los tipos de interés en el mercado secundario.
A pesar de esta estrategia para contener el efecto de las previsiones de repunte de la inflación, las compras netas descendieron a consecuencia del importante volumen de vencimientos de deuda contabilizados en el balance del banco central. En los últimos días, esta partida sumó 6.300 millones de euros, frente a los 4.900 millones de las siete jornadas anteriores.
El importe neto de las compras del BCE se limitó a 11.900 millones en la semana. Una cifra que supone además su segundo retroceso consecutivo en términos netos. En cifras brutas, la institución presidida por Christine Lagarde adquirió a través de los distintos programas en vigor un total de 29.100 millones de euros, frente a los 23.500 millones de la semana precedente.
Un año en vigor
Desde su lanzamiento en marzo de 2020, el BCE ha empleado ya 878.568 millones de euros de los 1,85 billones del importe del programa de emergencia, cuyo alcance fue ampliado por segunda vez el pasado mes de diciembre. Desde los 1,35 billones fijados en junio de 2020, frente a los 750.000 millones originalmente previstos.
El Consejo de Gobierno del BCE celebrará este jueves su reunión de política monetaria en la que, además de hacer públicas las nuevas previsiones macroeconómicas de la institución, podría recalibrar algunos de sus instrumentos con el objetivo de mantener unas condiciones favorables de financiación.