La Fed valora reducir el ritmo de la subida de tipos para evitar un daño mayor en la economía de EEUU

La Reserva Federal de EEUU (Fed) deja la puerta abierta a una eventual reducción del ritmo de las subidas de tipos de interés. El objetivo de la institución sería medir el impacto que en la economía está teniendo el endurecimiento de su política monetaria.

Así se desprende de las actas de la reunión que la Fed mantuvo a finales de julio y que se han publicado este miércoles. No proporcionan ninguna guía específica sobre la cuantía de los próximos aumentos de las tasas de referencia.

Los miembros de la institución han insistido en la necesidad de observar los datos que se conozcan hasta septiembre -cuando celebrará su próxima cita- para tomar una decisión al respecto.

[La inflación de julio afloja la presión sobre la Fed: el mercado ve posible que suavice las subidas de tipos]

La importancia de la publicación de estos documentos era máxima, ya que en las últimas semanas la hipótesis de que la inflación ha tocado techo en EEUU y que, por ello, la Fed será menos agresiva ha ido ganando peso entre los inversores.

Exactamente, el índice de precios al consumo (IPC) estadounidense se moderó en julio hasta situarse en el 8,5% en tasa interanual, gracias a una ralentización en los precios de la energía y, concretamente, del coste de la gasolina y el gas natural.

Previsiones

Si se excluye del cálculo de la inflación, la volatilidad de la energía y de los alimentos, la tasa de inflación subyacente se situó en julio en el 5,9%.

A inicios de la semana, las apuestas de los inversores estaban más sesgadas hacia un alza de medio punto porcentual. Sin embargo, poco antes de conocerse los documentos, el mercado daba una posibilidad del 47,5% un alza de 50 puntos básicos y del 52,5% a un aumento de 75 puntos básicos.

Los expertos de Generali Investments ya advertían hace unos días que a pesar de que el dato de inflación “reduce los temores de movimientos demasiado agresivos por parte de la Fed, no supone un cambio de juego para la política monetaria”.

Sin embargo, sí anticipaban una subida de 50 puntos básicos en septiembre, “con cierto riesgo de otro movimiento de 75 puntos básicos como en julio”.

Miembros

A pesar de la sorpresa del IPC estadounidense de julio, varios miembros de la institución, han señalado en los últimos días que solo se trataba del primer indicio de que “la inflación está empezando a moverse en la dirección correcta, pero que no cambia el camino”.

Uno de esos miembros ha sido el presidente de la Fed de Mineapolis, Neel Kashkari. Perteneciente al grupo de los halcones -aquellos con una postura más dura- consideró que los tipos de interés deberían situarse en el rango de entre el 3,75% y el 4% a finales de 2022.

Además, se opuso firmemente a la idea de que la Fed recortase las tasas en 2023 si la inflación se mantiene muy por encima del objetivo del 2%.

Algo menos duro ha sido el presidente de la Fed de Chicago. Charles Evans situó los tipos entre el 3,25% y el 3,5% a finales de este ejercicio y entre el 3,75% y el 4% al término del próximo.

El precio del dinero

En la actualidad, el precio del dinero se sitúa en EEUU entre el 2,25% y el 2,5%, niveles no vistos desde 2018, después de que la Fed haya aumentado los tipos 225 puntos básicos desde que comenzó el año.

La subida ejecutada por la institución en marzo fue de un cuarto de punto. Incrementó el ritmo en mayo hasta los 50 puntos básicos y volvió a pisar el acelerador en julio, cuando el alza alcanzó los 75 puntos básicos. Repitió el mismo movimiento en julio.