Como ocurrió el miércoles con la Reserva Federal (Fed), el Banco de Inglaterra tampoco ha sorprendido al mercado. Tal y como se esperaba -los pronósticos cambiaron casi a última hora-, la institución presidida por Andrew Bailey ha mantenido los tipos de interés en el 5,25%, tras la moderación de la inflación en Reino Unido.
La pausa de la vieja dama de Threadneedle Street -como se conoce el Banco de Inglaterra por estar en esa calle de Londres su sede- llega casi dos años después de que en diciembre de 2021 comenzase a elevar el precio del dinero.
El Banco de Inglaterra ha subido las tasas de referencia en 14 reuniones consecutivas. En total, el incremento ha sido de 515 puntos básicos. Los aumentos dieron inicio con una subida de 15 puntos básicos, para dar paso a alzas de 25, 50 y 75 puntos básicos.
De esa proporción fue el incremento del pasado diciembre. Desde entonces, los aumentos -salvo uno de 50 puntos básicos- han sido de un cuarto de punto. Ahora el Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra ha decidido hacer un alto en el camino.
Sin embargo, la decisión ha estado muy ajustada. Tanto que cinco de sus miembros han votado la pausa, mientras que los cuatro restantes se han mostrado a favor de incrementar los tipos de interés otros 25 puntos básicos.
En cualquier caso, el freno llega un día después de que se conociera que la tasa de inflación interanual del Reino Unido se situó en agosto en el 6,7%, una décima menos que en julio. Dicha tasa supone el menor nivel de inflación en el país desde febrero de 2022.
La inflación subyacente, que excluye la volatilidad de los precios de la energía, alimentos, alcohol y tabaco, disminuyó siete décimas en agosto, hasta situarse en el 6,2%. En este caso se trata de la cifra más baja desde el pasado mes de marzo, cuando también registró una tasa del 6,2%.
Bajadas en 2024
En opinión de los analistas de Nomura, “el aumento de 25 puntos básicos de agosto habrá sido el último del Banco de Inglaterra en este ciclo”. Los expertos de Schroders esperan que la inflación siga retrocediendo, lo que permitirá a la institución empezar a recortar los tipos en el segundo trimestre de 2024, “a medida que vea una senda de vuelta al objetivo”.
Así pues, creen que la inflación bajará al 7,3% este año -desde el 9,1% en 2022-, antes de situarse en una media del 3,1% en 2024. Mientras, el Producto Interior Bruto (PIB) de Reino Unido se seguirá desacelerando hasta situarse en el 0,3% en 2024, “evitando por poco una recesión técnica”.
Los últimos datos señalan que la economía británica se contrajo un 0,5% en julio respecto a junio. El descenso contrasta con el crecimiento, en la misma proporción, del mes anterior.
En ese sentido, los expertos de abrdn creen que “los últimos datos apuntan a que la actividad económica se ha ralentizado considerablemente durante el verano, a medida que las medidas de política monetaria adoptadas en el pasado empiezan a surtir efecto”.
En su opinión, las cifras del PIB británico “sugieren que la economía está ya al borde de la recesión, mientras que el mercado laboral parece haberse resquebrajado por fin, con un aumento del desempleo y un descenso de las ofertas de trabajo”.
Consideran que “los tipos se mantengan sin cambios hasta 2024, aunque la economía siga deteriorándose, antes de que se inicie un ciclo de relajación en el segundo semestre del año próximo”.
Otros bancos centrales
La reunión que han mantenido este jueves los responsables de política monetaria en Inglaterra no ha sido la única. También se han dado cita los miembros del Banco de Noruega, Suecia y Suiza.
El Banco de Noruega ha decidido elevar los tipos de interés 25 puntos básicos, hasta situarlos en el 4,25%. Además, los miembros de la institución nórdica han advertido de que probablemente volverá a incrementar las tasas de referencia en diciembre.
El mismo movimiento ha sido llevado a cabo por el Banco de Suecia, aunque en este caso el incremento de 25 puntos básicos ha llevado el precio del dinero al 4%. Asimismo, ha subrayado que esperaba volver a subirlos.
Por el contrario, los miembros del banco suizo han mantenido los tipos de interés en el 1,75%. Sin embargo, sus miembros han dejado la puerta abierta a seguir endureciendo la política monetaria en el futuro.
En Turquía, en niveles de 2003
Mención aparte merece la subida de tipos que también este jueves ha ejecutado el Banco Central de Turquía, de 500 puntos básicos. Así, las tasas de referencia han pasado del 25% al 30%, su nivel más alto desde septiembre de 2023.
De este modo, el banco presidido por Hafize Gaye Erkan continúa dando pasos para hacer que la inflación se reduzca al 5% a medio plazo. Teniendo en cuenta los últimos datos disponibles, del pasado agosto, la inflación turca rozó el 59% tras incrementarse durante siete meses consecutivos.
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Y ello a pesar de que desde el pasado junio, cuando Hafize Gaye Erkan tomó posesión de su cargo, el banco central turco ha acometido un giro radical hacia la ortodoxia en su política monetaria.
Exactamente, ha elevado los tipos de interés 2.150 puntos básicos en cuatro reuniones consecutivas, desde el 8,50%, nivel en el que se encontraban antes del nombramiento, hasta el actual 30%.