Por su parte, la inflación subyacente -que excluye energía, alimentos, alcohol y tabaco, los elementos más volátiles- se mantuvo estable en el 2,9% en junio. Este es un indicador estructural clave para el Banco Central Europeo (BCE) a la hora de decidir sobre los tipos de interés.

Debido precisamente a esta persistencia de la inflación, el BCE tiene previsto frenar de momento el recorte de los tipos de interés que inició en junio y mantener sin cambios el precio del dinero en el 4,25% en su reunión de este jueves en Fráncfort, según coinciden todos los analistas. La presidenta, Christine Lagarde, ya ha avisado de que el camino para reducir la inflación al objetivo del 2% será "accidentado" en los próximos meses.

Tasa de inflación en los países de la UE en junio

El mes pasado, la mayor contribución a la tasa de inflación anual de la eurozona provino de los servicios (+1,84 puntos porcentuales), seguidos de alimentos, alcohol y tabaco (+0,48), productos industriales no energéticos (+0,17) y energía (+0,02 puntos porcentuales).

Con estos nuevos datos, España es el tercer país de la UE con una inflación más elevada, empatado con Hungría. Una brecha que se traduce en una pérdida de competitividad. En junio, los Estados miembros con mayor presión de precios fueron Bélgica (5,4%) y Rumanía (5,3%).

En el extremo contrario de la clasificación, las menores tasas de inflación se registraron en Finlandia (0,5%), Italia (0,9%) y Lituania (1%). En comparación con mayo, la inflación interanual cayó en 17 Estados miembros, se mantuvo estable en 1 y subió en 9.

El BCE ejecutó en junio el primer recorte de tipos en ocho años y los dejó en el 4,25%. Este cambio de orientación se produjo tras una abrupta subida del precio del dinero (con diez alzas consecutivas en apenas 15 meses, entre julio de 2022 y septiembre de 2023, pasando del 0% al 4,5%) para combatir la crisis inflacionista provocada por la guerra de Ucrania y la energía. Un ciclo alcista que ha ido seguido de ocho meses de pausa, periodo en el que los tipos se han mantenido en máximos históricos. 

Sin embargo, Lagarde ha dejado claro que el ritmo de bajada de los tipos no va a ser tan rápido ni constante como el de la subida. El BCE tomará las decisiones reunión a reunión, dependiendo de la evolución del IPC en cada momento. Los analistas sólo esperan dos recortes adicionales este año, probablemente en septiembre y diciembre.