El histórico desplome económico provocado en Europa por la Gran Reclusión se ha traducido en la pérdida de alrededor de 5,5 millones de empleos en la Unión Europea en el segundo trimestre, de los que 4,5 millones correspondieron a la zona euro, lo que representa una caída récord de la ocupación entre los Veintisiete del 2,6% y del 2,8% entre los Diecinueve respecto de los tres meses anteriores, las mayores de toda la serie histórica, según los datos ajustados estacionalmente de Eurostat.
"Estas fueron las caídas más pronunciadas observadas desde que comenzaron las series cronológicas en 1995", confirmó Eurostat, recordando que en el primer trimestre de 2020, el empleo había disminuido un 0,2% en la zona del euro y un 0,1% en la UE.
Según la agencia estadística europea, en el segundo trimestre del año la cifra de ocupados en el conjunto de la UE era de 203,56 millones, lo que representa una caída de 5,5 millones respecto del número de trabajadores registrados en los tres primeros meses de 2020. Entre los países del euro, el número de ocupados disminuyó en el trimestre en 4,5 millones, hasta 155,89 millones.
España, que lideró la caída del PIB en el segundo trimestre entre los países de la UE, con un hundimiento del 18,5%, registró entre abril y junio un descenso de 1,5 millones de ocupados, según los datos de Eurostat, hasta 18,66 millones.
La economía de la eurozona registró en el segundo trimestre de 2020 una caída del 12,1% respecto de los tres meses anteriores, cuando ya había retrocedido un 3,6%, lo que representa el mayor desplome del PIB de toda la serie histórica y confirma la entrada en recesión técnica de la zona euro, según Eurostat.
Entre los Veintisiete, el PIB registró entre abril y junio un descenso récord del 11,7%, después de caer un 3,2% en el primer trimestre, mientras que el nivel de ocupación en la UE registró una bajada del 2,6%, tras caer un 0,1% en los tres primeros meses de 2020, lo que supone la peor evolución del empleo de toda la serie histórica.
En comparación con el segundo trimestre de 2019, el PIB de la zona euro experimentó una contracción del 15%, mientras que la economía de la UE retrocedió un 14,1% interanual.
Entre los Veintisiete, las mayores contracciones trimestrales del PIB en el segundo trimestre correspondieron a España (-18,5%), por delante de Portugal (-13,9%) y de Francia (-13,8%), mientras que las economías que sufrieron un menor impacto negativo en el trimestre fueron las de Finlandia (-3,2%), Lituania (-5,1%) y Dinamarca (-7,4%).
Respecto del segundo trimestre de 2019, España registró una caída interanual del 22,1%, la mayor de toda la UE, seguido de Francia, con una contracción del 19%, y de Portugal, con un retroceso del 16,3%.
En comparación con la caída del PIB del 12,1% de la eurozona en el segundo trimestre y del 15% interanual, la economía de Estados Unidos registró una contracción del 9,5% en ambos casos, mientras que en Reino Unido el PIB cayó un 20,4% trimestral y un 21,7% respecto del segundo trimestre de 2019. Por contra, China, que había registrado una contracción del 10% en los tres primeros meses de 2020, creció un 11,5% entre abril y junio, siendo la primera gran economía mundial en revertir el impacto de la crisis del coronavirus.