La subida del salario mínimo interprofesional (SMI) se enfría. A pesar de las presiones de los sindicatos y de la vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz, para aumentarlo, Nadia Calviño, vicepresidenta segunda de Asuntos Económicos, ha aparcado, de nuevo, esta posibilidad al menos hasta 2022. 

A las preguntas de los periodistas, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha considerado que una decisión respecto al SMI debe esperar. "Vamos a ver cómo evoluciona el empleo en esta segunda parte del año", ha comentado, al tiempo que ha añadido que esto se abordará antes en negociación con patronal y sindicatos. "Estamos en un momento de elevada incertidumbre". 

En este sentido, ha insistido en que la intención del Ejecutivo es la de que "cuanto antes podamos retomar la senda de subida que teníamos antes de la pandemia". Con todo, ha añadido que determinadas decisiones hay que tomarlas con "responsabilidad", pensando en el impulso al crecimiento económico y al empleo.

"Todo el Gobierno está comprometido con la subida del salario mínimo interprofesional y lo hemos demostrado con hechos porque lo hemos subido un 30%, por encima de otros países", ha asegurado Calviño.

La vicepresidenta económica se ampara en que la situación financiera de España todavía está marcada por la "incertidumbre" y la prioridad debe ser la creación de empleo y reactivar a los trabajadores de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).

Sin embargo, fuentes de los ministerios de Unidas Podemos insisten en que Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno, todavía no ha tomado una decisión sobre la subida del SMI y que las negociaciones al respecto no han terminado todavía. 

Reforma fiscal

Por otro lado, María Jesus Montero, la ministra de Hacienda, ha descartado que la reforma fiscal que se plantea en el Plan de Recuperación, Transformación y Eficiencia, se aborde a lo largo de este año, tal y como pide Unidas Podemos.

En este sentido, ha recordado que el grupo de expertos que tiene que gestarla no generará sus propuestas hasta los primeros meses de 2022 y, de este calendario, la responsable de las Cuentas Públicas no se piensa mover.