El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha dicho este viernes que la implantación de la jornada laboral de cuatro días a la semana se enmarca en "los debates para ganar elecciones". Además, ha afirmado que "en estos momentos son necesarios cinco días".
Garamendi ha reiterado que "cuando se habla en serio de los temas tienen mil matices", y que, "curiosamente, cuando se hablan siempre son los del mismo grupo los que los hablan y se reúnen entre ellos".
"Estamos en elecciones permanentes y estamos en política, y nosotros no hacemos política, levantamos empresas", ha dicho Garamendi. No obstante, ha asegurado que cuando ese asunto "llegue a la mesa" de negociación "hablaremos de ello" porque "depende del sector y de la empresa", en declaraciones recogidas por Europa Press.
Al hilo, ha insistido en que en el actual contexto económico, en el que "estamos saliendo de un agujero muy profundo", las pequeñas empresas españolas representan el 98% y la media por cada una de ellas es de cinco personas.
"En una farmacia en la que el trabajo es de cuatro días, nadie va a aceptar el trabajo por un día. En cualquier caso, nosotros siempre nos sentamos en la mesa y estamos dispuestos a hablar de lo que toque, pero cuando toque", ha añadido.
Confianza a los inversores
Garamendi ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa junto a los presidentes de la Confederación de Pequeñas y Medianas Empresas (CEPYME) y la Confederación Regional de Empresas de Organizaciones Empresariales (CROEM), Gerardo Cueva y José María Albarracín, respectivamente.
Preguntado sobre el anuncio del Banco Central Europeo (BCE) sobre el cierre de compra de deuda en verano ante el incremento de la inflación, el líder de los empresarios españoles ha señalado que el efecto será la subida de los tipos de interés, y esto influirá "de una forma importante" en la economía del país.
Ante este escenario, ha reclamado "rigor" y "ortodoxia presupuestaria" al Gobierno central, al tiempo que ha insistido en que "es fundamental" dar confianza a los inversores.
Respecto al pacto de rentas, Garamendi ha tildado de "falta de responsabilidad" que los salarios se equiparen a la inflación, aunque esta tienda "a la baja" a lo largo de este año. "Sería un error y los más perjudicados serían los más vulnerables", ha agregado, para recordar que las empresas pueden recurrir al llamado "descuelgue".