Una de las investigadas por la supuesta estafa contra UGT cometida por una extrabajadora del sindicato ha asegurado ante la juez que dicha empleada le pagó viajes de lujo a lugares como Dubái, las islas Maldivas o las Seychelles, dada la amistad que unía a ambas.
Así lo ha declarado este lunes una de las presuntas beneficiadas del desvío, ante la juez sustituta del Juzgado de Instrucción número 21 de Madrid. El supuesto desvío de fondos del sindicato fue denunciado por la sección madrileña de UGT y costó la dimisión, el pasado diciembre, a su entonces secretario, Luis Miguel López Reillo.
Asimismo, la Fiscalía también interpuso una denuncia contra Maika T. L., la ya exempleada del sindicato, su marido y tres amigas, entre las que se encuentra la investigada que ha declarado este lunes, que ha negado conocer el origen irregular de los fondos de los que se benefició. También ha manifestado que recibió de Maika cheques por valor de más de 40.000 euros. Así lo confirman a EL ESPAÑOL fuentes jurídicas.
El Ministerio Público imputa a todos ellos un delito continuado de estafa y otro de falsedad en documento mercantil. Estaba previsto que este lunes declarasen ante la juez los cinco imputados, pero sólo lo ha hecho una de ellos.
En su denuncia, el fiscal señaló que Maika T. L., que es hija de una diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid, desvió, supuestamente, 2.099.680 euros procedentes de fondos transferidos del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa).
El Fogasa es un organismo autónomo adscrito al Ministerio de Trabajo que garantiza a los empleados la percepción de salarios o indemnizaciones por despido que estén pendientes de pago a causa de la insolvencia de su empresa o de un procedimiento concursal abierto en la compañía.
Según relató la Fiscalía, entre las labores de Maika T. L. en el sindicato se encontraba la de emitir estos cheques para el pago de indemnizaciones por despido a trabajadores.
Entre 2019 y 2021, "bajo la apariencia de librarlos en favor de diversos trabajadores que habían sido despedidos y que habían encargado a UGT Madrid que tramitaran su correspondiente indemnización", Maika T. L. presentó a los responsables del sindicato estos documentos falseados, cuyo importe iba a ser abonado a cargo del Fogasa.
En esos cheques, habría colocado como beneficiarios nombres de maestros y médicos que habían superado alguna oposición y que elegía al azar tras consultarlos en ficheros de Internet, sin que tuvieran relación alguna con UGT.
"Una vez firmados dichos cheques por los responsables [del sindicato], la persona denunciada simulaba la firma de los supuestos beneficiarios en el recibí", subrayó el Ministerio Público. Y, posteriormente, habría suprimido "con una goma que borra tinta", los datos personales de los médicos y maestros con los que antes había rellenado el documento, sustituyéndolos por los de su marido y sus tres amigas.
"Incluso en algunas ocasiones, además de modificar la identidad del beneficiario [la trabajadora], también alteraba el importe a cobrar", subrayó la Fiscalía en su denuncia, en la que cifró en 71 los cheques fraudulentos, por un valor total de 372.660,53 euros.