Por fin ha empezado, oficialmente, la segunda fase de la reforma legislativa de las pensiones. Entre otras cuestiones, el Gobierno ha propuesto a sindicatos y patronal la "extensión moderada del periodo de cómputo de la pensión", que se llevaría de 25 años a 30.
De este periodo, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de José Luis Escrivá propone que se seleccionen los mejores 28 años de cotización. "Es decir, se descartan las peores 24 mensualidades", indica, en un comunicado. Además, el cambio se realizaría de manera progresiva.
La propuesta inicial del Ejecutivo también incluye "la mejora del tratamiento de las lagunas de cotización para las mujeres", así como para "los varones cuya carrera de cotización se haya visto minorada tras tener un hijo, en línea con el funcionamiento del complemento de brecha de género".
Dicho "tratamiento especial" también se ha recogido para las lagunas de cotización del colectivo de autónomos.
La propuesta presentada por el equipo de Seguridad Social a CEOE y Cepyme y a los sindicatos CCOO y UGT también propone, tal y como estaba previsto, elevar las bases de cotización máxima.
Concretamente, la propuesta de Escrivá consiste en vincular, por ley, la evolución de la base máxima al criterio de revalorización de las pensiones, el IPC. Es decir, que las bases máximas de cotización quedarían indexadas con la inflación
A esto se sumaría un "incremento adicional anual de 1,154 puntos entre 2025 y 2050; un aumento que irá acompañado de un incremento de la pensión máxima", según indican desde el departamento de Escrivá.
De esta manera, la subida total de las cotizaciones máximas en este periodo (sin sumar los incrementos que puedan producirse al ser indexadas con la inflación) sería de unos 27,5 puntos, por debajo de los 30 que se habían llegado a manejar.
En principio, ni sindicatos ni CEOE avalan la propuesta, aunque la negociación no ha hecho más que empezar. Por la parte de los sindicatos, se celebra el incremento de las bases máximas de cotización pero se critica el incremento del periodo de cómputo de la pensión de 25 a 30 años.
Desde CCOO, indican que en la reunión "hemos recordado que ésta no es una medida recogida en esta ocasión en las Recomendaciones del Pacto de Toledo, aunque sabemos que ha sido incluida por el Gobierno en el marco del Plan de Recuperación".
"No es, en nuestra opinión, una medida necesaria en este momento, cuando acabamos de culminar el desarrollo de la extensión anterior", indican. CCOO también pone en duda que la iniciativa cuente con "un apoyo suficiente para su tramitación parlamentaria, lo que constituye una condición necesaria para cualquier nuevo debate al respecto".
Oposición política
Los de Unai Sordo ya avisan: partidos como Unidas Podemos (socio del Gobierno de coalición) y ERC (aliado clave del Ejecutivo en las votaciones parlamentarias), se han opuesto en varias ocasiones al incremento del periodo de cómputo.
En el otro lado de la balanza está la CEOE. Fuentes de la patronal indican que estudiarán la oferta del equipo de Escrivá, pero avisan: "De entrada no vemos que pueda dar lugar a acuerdo. Además, llega tan tarde que no se entiende bien el papel de los agentes sociales si se quiere aprobar en los plazos previstos y sin que haya un acuerdo político".