El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ve "lógico" que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya optado por un perfil "continuista" para su Ejecutivo, sobre todo en las carteras económicas, ante los "buenos resultados para el país" de la legislatura pasada.
Desvelados todos los nombres del nuevo Gobierno, apenas ha habido sorpresas en los ministerios económicos. Sánchez ha mantenido en Trabajo a Yolanda Díaz y en Economía, a Nadia Calviño, a la espera de que se decida su futuro en el Banco Europeo de Inversiones (BEI). María Jesús Montero se asegura Hacienda y Función Pública otros cuatro años más y añade la Vicepresidencia Cuarta.
El movimiento ha estado en la Seguridad Social. José Luis Escrivá se irá al nuevo Ministerio de Transformación Digital, y en su lugar entrará Elma Saiz.
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"Es continuista, pero refuerza el papel político (...). Estoy satisfecho con que se reiteren las responsabilidades que se ocupaban hasta ahora. Estamos muy satisfechos porque creo que los acuerdos alcanzados han sido muy positivos para el país", ha reiterado el líder sindical en una rueda de prensa.
Aunque las negociaciones fuertes se abordaron y pactaron en la pasada legislatura, el sindicato afronta los próximos años con bastantes reivindicaciones, sobre todo para la cartera de Díaz.
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En Trabajo, las caras serán las mismas. La novedad estará en la Seguridad Social, con la llegada de Saiz desde la política navarra. "Conozco a la nueva ministra. No he negociado con ella, pero hemos estado alguna vez en Pamplona", ha dicho Sordo sobre el nombramiento.
La Seguridad Social no se presenta, de entrada, como un territorio de nuevas negociaciones, ya que "las grandes reformas" se pactaron en la legislatura anterior. En esta, sólo "quedan algunas cosas", como desplegar cuestiones cerradas en el nuevo Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
Perfil político
El nuevo Gobierno combinará el "continuismo" de las cartera económicas con nombres de "alto perfil político", como ha reconocido el presidente, Pedro Sánchez, en su comparecencia de este lunes.
Sordo ha recogido sus palabras y les ha quitado los eufemismos. "Es una forma fina de decir que va a ser una legislatura de mucha confrontación ideológica y de narrativas en pugna", ha resumido el secretario general de CCOO.
Traducido: va a ser una legislatura política y de enfrentamientos, por lo que ha urgido al Gobierno a "tomar medidas que mejoren realmente la vida de las personas" y, sobre todo, que la mayoría social lo perciba así.
"Si sólo va de construcción de narrativas, la gente termina interpretando que lo que discuten los políticos no va con ellos, porque la gente no es tonta", ha advertido.
Agenda del sindicato
CCOO presentó en septiembre sus prioridades para esta legislatura, pero el Gobierno todavía estaba en funciones. Ahora, con el Ejecutivo listo para tomar posesión de sus carteras, el sindicato ha vuelto a exponer su agenda.
Su primera exigencia es la "concreción del Estatuto del Becario, que se quedó en el limbo de los justos", como ha recordado Sordo. CCOO se niega a volver a abrir las negociaciones a la CEOE y reclama al Gobierno que lleve al Boletín Oficial del Estado (BOE) el texto pactado junto con Trabajo y UGT.
Una vez cerrado ese punto, arrastrado de la legislatura anterior, la urgencia está en pactar la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). CCOO y UGT ultiman la propuesta que llevarán a la mesa de negociación con Trabajo, aunque ya advierten de que pedirán una revalorización por encima de la inflación.
"Por encima de la inflación con la que cerremos el año (...). Ya habrá tiempo de ir acomodando el 60% de la media salarial. No es un tope, es una base", ha incidido el secretario general de CCOO.
Otro de los puntos recogidos en el acuerdo de Gobierno entre PSOE y Sumar es la transformación del Estatuto de los Trabajadores en el Estatuto de los Trabajadores del Siglo XXI. Sordo ha llamado al Ejecutivo a "iniciar las negociaciones cuanto antes", porque la modificación de esta norma "no se improvisa".
"Hay que tocar medidas complicadas que requieren de negociación, diálogo y unas cuantas broncas. Queremos la regulación de la economía de plataformas, del tiempo parcial, la reducción de la jornada y modificar el régimen de despido. Creo que con eso se le mete un meneo importante", ha señalado.
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Por el último, CCOO también cree que ha llegado el momento de evaluar los servicios públicos y la financiación autonómica.
En este sentido, Sordo ha recomendado al Gobierno que lance "cuanto antes" un mensaje al respecto de que todo lo que tiene que ver con la condonación del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) "se va a hacer en un marco multilateral".
Cuestiones colaterales
Al margen de estas cuestiones prioritarias, la agenda del sindicato se extiende a "cuestiones colaterales pero de mucha trascendencia". Entre ellas, Sordo ha citado el despliegue de los fondos europeos para la reindustrialización del país o el desarrollo de las infraestructuras y de la cohesión social, "determinante en esta legislatura".
Además, como ya adelantó EL ESPAÑOL-Invertia, CCOO reclamará en esta etapa una ley de participación institucional que "defina los perímetros" de los agentes sociales.
Entre las peticiones más alejadas de las materias sindicales, CCOO también ha instado al Gobierno a tomar decisiones inmediatas sobre la vivienda.
"Se ha desagregado el Ministerio de Vivienda. No me parece una mala opción, siempre y cuando tome medidas valientes para controlar el precio", ha valorado, en alusión a la cartera que ocupará Isabel Rodríguez.
Sordo da por anticipado un "boicot autonómico en las comunidades autónomas del PP, que son casi todas" y exige al Gobierno que sea "valiente en topar precios".
"Se pueden hacer muchas cosas que tengan como consecuencia una bajada drástica de los precios de venta de la vivienda", ha asegurado.
Para Sordo, estas decisiones de "alto coste político" no pueden esperar hasta el fin de la legislatura y demanda al Gobierno "tocar la ley de vivienda en la primera parte" del mandato de Pedro Sánchez para "provocar un efecto caída de los precios".