UGT ha pedido al Gobierno que destine fondos para la formación de las personas que están negociando los convenios colectivos y los planes de igualdad, ante la futura transposición de la directiva europea de igualdad retributiva entre hombres y mujeres, como ha señalado la vicesecretaria general del sindicato, Cristina Antoñanzas.
La organización sindical recalca que existe "un problema serio en la formación" de los negociadores, tanto en los sindicatos como en la patronal. UGT estima que, en su caso, se necesitarían unas 7.000 personas para negociar planes, "un potencial humano" del que aseguran no disponer.
Por eso, desde el sindicato celebran "mucho la norma", pero avisan a Trabajo de que "va a ir con más lentitud" de la que les gustaría. Para revertirlo, insisten en que destinen fondos a las personas que van a negociar esa igualdad retributiva y reclaman que se abra cuanto antes la mesa de diálogo para la transposición de la directiva.
Brecha del 18,36%
UGT ha presentado este lunes su informe de desigualdad salarial, del que se desprende que la brecha retributiva entre hombres y mujeres fue del 18,36% en 2021, último dato disponible en la Encuesta de Estructura Salarial, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En comparación con el año anterior, apenas se cerró en 0,36 puntos porcentuales.
UGT resalta que "es indiscutible" que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) desde 2019 ha tenido "una influencia directa en el descenso de la brecha salarial".
Por otro lado, UGT advierte del impacto de la parcialidad en la retribución salarial. Si buen la brecha existe tanto en los contratos indefinidos como en los temporales, "sigue siendo mayor en los temporales", como ha apuntado Antoñanzas durante la presentación del documento.
Con datos de 2021, el 23,25 % de las mujeres trabajan a tiempo parcial frente al 6,7% de los hombres. En estos casos, los salarios de ellas eran de 11.650,36 euros y los de ellos, de 12.888,85 euros.
Antoñanzas también ha lamentado que "ser mujer y joven está doblemente penalizado". De hecho, a pesar de que entre las trabajadoras de 25 a 35 años hay más tituladas superiores, se mantiene la brecha salarial.
Esta diferencia retributiva también provoca que las mujeres alarguen su vida laboral después de los 65 años para tratar de compensar las pérdidas que arrastran a lo largo de su carrera.
Ante la situación salarial, UGT avisa de que va a seguir "exigiendo que se cumpla toda la normativa que existe de igualdad retributiva", en concreto, el Real Decreto 902/2020, sobre registros retributivos. También la ya citada transposición de la directiva europea en transparencia salarial.