La prórroga de dos meses concedida por Bruselas a España para tratar de aprobar la reforma de los subsidios por desempleo y recibir el desembolso del cuarto pago de los fondos europeos está cerca de expirar sin que el Gobierno haya cerrado ningún texto. Para CCOO, parte de las negociaciones, la falta de avance se debe a las "dudas" sobre su aprobación en el Parlamento.
El Ministerio de Trabajo y Economía Social ya se encontró con el rechazo de la Cámara Baja al Real Decreto-ley de la reforma de los subsidios. Por eso, ahora quiere amarrar bien los votos y evitar otro revés, esta vez en la votación de un proyecto de ley.
Pese a las dificultades parlamentarias, en la cartera de Yolanda Díaz "no han renunciado" a sacar adelante la reforma de los subsidios por desempleo, como ha asegurado este jueves el secretario de Protección Social y Políticas Públicas de CCOO, Carlos Bravo, en una rueda de prensa. Sin embargo, observa al mismo tiempo "cierta parálisis".
"Eso debe entrar en Cortes, pero con probabilidades de ser aprobado. Necesitamos interlocución entre el Gobierno y los grupos parlamentarios. En algún caso, está costando", ha comentado Bravo.
El secretario de Protección Social y Políticas Públicas del sindicato es consciente de que el Gobierno "no parece tener la mayoría parlamentaria adecuada". Bravo sostiene que quienes votaron a favor del Real Decreto en su momento también lo harán ahora con el proyecto de ley, que, además, puede incluir mejoras presentadas por los grupos parlamentarios.
En la votación del Real Decreto, Podemos, PP y Vox se opusieron al texto presentado por Díaz. En esta ocasión, tampoco parece que el antiguo partido de la vicepresidenta segunda vaya a cambiar su voto.
"El problema está en que hay un grupo parlamentario que podría haber apoyado y no lo hizo, y otros dos que no apoyaron ni tienen perspectivas de que vayan a hacerlo", ha recordado Bravo.
CCOO también está manteniendo contactos con los grupos parlamentarios para tratar de destrabar la votación en el Congreso y conseguir esta reforma, de la que, además, dependen 37.000 millones de euros de los fondos europeos. La interlocución del sindicato con los partidos está siendo "muy fluida", aunque con algunos grupos cuesta más trabajo.
"Querríamos hablar con todos y, especialmente con aquellos que no estuvieron de acuerdo (...). Hemos pedido un contacto y una reunión a Podemos y nunca la hemos tenido. Hemos pedido la reunión en dos ocasiones. La contestación es cordial, pero no se concreta", ha lamentado Bravo.
Tanto la negociación de la reforma como su envío a las Cortes se ha topado ahora con un nuevo ciclo electoral, que inicia este mes con las elecciones vascas, el próximo con las catalanas y termina en mayo, con las europeas. Ante ese contexto, Bravo teme que algunos partidos estén haciendo "cálculos electorales".
A todos ellos, les ha advertido de que "no es de recibo una parálisis parlamentaria" para todas aquellas personas que dependen de una prestación por desempleo. "Las razones se las tendrán que explicar", ha zanjado.
Sin documentos
Si bien la reforma de los subsidios por desempleo resulta esencial para España por sus compromisos con Bruselas, Bravo observa un "proceso anómalo" desde el Gobierno, empezando por las prisas y el escaso diálogo con las que se elaboró el Real Decreto tumbado. Fue entonces cuando Trabajo quiso convocar a los agentes sociales para una mesa de negociación.
"La mesa ha tenido dos sesiones formales. Nosotros tenemos contactos permanentes con todos", ha aclarado Bravo. No obstante, ha insistido en que Trabajo "no ha presentado ninguna propuesta por escrito".
Pese a ello, el sindicato da ya por cerradas las prestaciones por desempleo con parcialidad y la regulación del Ingreso Mínimo Vital (IMV), con los colectivos que pasarán a recibir esa prestación. Al margen de ellas, CCOO tiene otras cuestiones "muy relevantes" que "no parecen tener una respuesta positiva".
En el sindicato no entienden que la propuesta del Ministerio excluya a las personas perceptoras del subsidio para mayores de 52 años de la modificación de la cuantía del subsidio. Para el resto de perceptores quedaría en un 95% del IPREM durante los primeros seis meses; en el 90% del IPREM los siguientes seis; y en el 80% del IPREM el resto del subsidio.
CCOO también espera conocer alguna propuesta, que todavía no está sobre la mesa, sobre la base de cotización de los mayores de 52 años. Además, desde el sindicato reclaman más políticas activas de empleo para la reincorporación de este colectivo, por la vía de los incentivos y la formación.
Por otro lado, CCOO también considera aún pendiente de negociar la ampliación del subsidio a personas menores de 45 años sin cargas familiares. El sindicato aboga por ampliar el perímetro y permitir su acceso a trabajadores con 12 meses cotizados, tras percibir cuatro meses o 120 días de prestaciones contributivas.
Asimismo, CCOO pide al Gobierno una actualización del IPREM. Este indicador ha perdido, según CCOO, un 14% de poder adquisitivo y se encamina hacia el 17% este año si no se actualiza.