Sólo un mes de alquiler supone para los jóvenes españoles desembolsar el 92% de su salario, por lo que este es uno, entre muchos otros, de los problemas que dificultan la emancipación de los mismos, según el Consejo General de la Juventud (CGJ). En 2023, los precios alcanzaron el valor más alto de la historia. Cuando la media para alquilar un piso estándar se situaba en los 968 euros al mes, 88 euros más que un año antes (+10%).
Cabe destacar que a la suma de estos resultados se le debe de añadir que los jóvenes se encuentran en un mercado laboral cada vez más precario y con sueldos bajos, lo que provoca que siete de cada diez que trabajan sigan viviendo en casa de sus padres, según el Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España, presentado este lunes.
Por su parte, el precio de los suministros ha sido lo que más ha subido. En concreto, un 17,3%, situándose en 163,61 euros al mes. Estos precios han provocado que menos jóvenes se hayan independizado en solitario, según los resultados
Además, tal y como refleja el estudio, ni siquiera alquilando una habitación en lugar de una vivienda entera, las personas jóvenes se libran de dedicar el 30% de su salario a la vivienda (el máximo que recomiendan los organismos internacionales).
De hecho, en España, el precio mediano de alquiler de una habitación era de 380 euros al mes, lo que corresponde con el 36,2% del salario neto mensual de una persona joven.
Este porcentaje sube un 40% más, en algunas capitales de provincia, como Málaga, Sevilla, Barcelona, Valencia, Santa Cruz de Tenerife, Las Palmas de Gran Canaria o Palma de Mallorca.
Tasa de emancipación
Por otro lado, el estudio revela que la tasa de emancipación en España subió hasta el 17% en el segundo semestre de 2023. Lo que supone siete décimas más que en el primer semestre de 2023, un punto más que hace un año. Aunque todavía 7 de cada 10 jóvenes que trabajan (70,4%) siguen viviendo en casa de sus padres, como recoge Europa Press.
Según destaca el informe, es el mejor dato de emancipación desde el primer semestre de 2020, cuando se desencadenó la crisis mundial causada por la COVID-19 y, además, se encadenan cinco semestres seguidos de subida en la tasa de emancipación. No obstante, aún está lejos de las cifras alcanzadas antes de la pandemia, cuando el porcentaje de emancipación era del 18,7% y antes de la crisis de 2008 (26,1%).
Desde el CJE hacen una doble lectura de los datos. "Aunque nos emancipamos más, lo hacemos en peores condiciones, por lo que el resultado de mejora del porcentaje de emancipación no se puede celebrar", ha señalado en rueda de prensa la presidenta de la entidad, Andrea González Henry.
Después, ha exigido mejoras en las condiciones de acceso a la vivienda y apelar a las administraciones para pedir que sea un tema de urgencia en la agenda pública.
"Nos emancipamos lejos de casa, obligadas por la falta de empleo digno en los lugares donde la vivienda es más asequible y por la falta de vivienda de calidad en los lugares donde se encuentra el empleo. Tenemos los alquileres más altos de la historia, es una de las razones por las que no nos emancipamos", ha reiterado González durante la presentación del informe, al tiempo ha añadido que esta situación puede afectar gravemente a la salud mental.
En concreto, del documento se desprende que, a finales del año pasado, había en España 236.333 personas jóvenes más viviendo fuera del hogar familiar que un año antes. Esta mejora de la tasa de emancipación estuvo acompañada de una bajada de 1,08 puntos en la tasa de desempleo y de un aumento del 4% del salario mediano de una persona joven.
No obstante, el CJE advierte de que, a pesar de estas mejoras, hay distintos factores que podrían propiciar una bajada en la tasa de emancipación en el corto y medio plazo.
El primero de estos factores es el incremento en la edad media de emancipación, que se situó en 2023 en los 30,4 años frente a los 26,3 años de media en Europa. Además, la tasa de emancipación en España era 14,9 puntos más baja que la europea.
Además, el informe revela que, a pesar de que la tasa de emancipación subió en el conjunto del Estado, hubo un total de cinco comunidades autónomas (Baleares, Extremadura, Región de Murcia, Navarra y La Rioja) en las que hay un menor porcentaje de personas jóvenes emancipadas que un año antes.
Asimismo, se observan "grandes diferencias" entre las distintas autonomías, por ejemplo, entre Cataluña, con un 20,6% de jóvenes emancipados y Extremadura con un 13,6%.
Tasa de pobreza
La investigación también hace hincapié en la tasa de riesgo de pobreza y advierte de que el año pasado cerró con un 31,2% de la juventud en riesgo de pobreza y exclusión social, un punto más que en 2022, siendo el segundo colectivo con mayor riesgo de pobreza, superado solo por la infancia.
Por otro lado, el estudio se refiere a los conocidos como 'ninis' (jóvenes que ni estudian ni trabajan ni tienen capacidad para hacerlo) para puntualizar que "tan sólo" representan el 2,1% de la juventud inactiva en España (un total de 70.831 personas).
Mientras, el informe destaca el aumento de los 'sisis', los jóvenes que estudian y trabajan a la vez, cuyo porcentaje subió del 32,9% en el segundo semestre de 2022 al 34,1% a finales de 2023, siendo más alto entre las mujeres (lo hacían casi cuatro de cada diez) que entre los hombres (tres de cada diez).
El técnico de investigación de CJE, Rubén Díaz, ha recalcado que la tendencia entre las mujeres es emanciparse en pareja o compartiendo vivienda, mientras que los hombres tienden a hacerlo en solitario.
Dar solución
Ante estos datos, el vicepresidente del CJE, Juan Antonio Báez, ha añadido que "es responsabilidad de las Administraciones públicas dar una solución a la situación precaria de las personas menores de 30 años que en muchos casos se ven obligadas a salir de casa a pesar de tener que sobreendeudarse por la falta de trabajo en sus municipios o comunidades autónomas de nacimiento".
"Con estos datos, queremos reivindicar un cambio para que la situación no sea tan precaria. Hemos sido una generación que hemos llegado tarde a los sueldos dignos, a emanciparnos jóvenes, a alquilar sin tener que endeudarnos, a pensar en tener un piso en propiedad -solo es posible acceder a una hipoteca si se ahorrase 4,4 años sin gastar ni un solo euro en nada-, ha añadido Báez.
De esta manera, "queremos saber cuando se aprobará el Estatuto del Becario, el bono de alquiler que por parte de las CCAA aún no se ha puesto en marcha. Pero necesitamos que los políticos escuchen a las personas jóvenes", ha concluido.
Entre las soluciones que el CJE considera que son necesarias, han puesto en valor la reforma laboral o la subida del salario mínimo interprofesional, que aseguran, ha reducido, entre otros aspectos, la temporalidad.