España se prepara para un gran cambio que llegará en cuestión de días. Se trata del cambio por completo del sistema de subsidios. A partir del próximo 1 de noviembre el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) dejará de ofrecer algunas de sus prestaciones más conocidas e importantes.
Esta es una muy mala noticia para cientos de miles de españoles que eran beneficiarios de alguna de estas ayudas, especialmente necesarias para aquellos que atraviesan dificultades para llegar a final de mes. Dentro de esta nueva normativa, hay dos prestaciones que serán historia y que instaurarán un cambio muy importante en el panorama nacional.
La primera de ellas es la ayuda familiar, la cual podría complicar la situación de muchos hogares en nuestro país. Y la otra será el subsidio para mayores de 45 años. Estos cambios responden a la reforma de los subsidios por desempleo que estará regulada en el Real Decreto-ley 2/2024.
Este fue aprobado por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, cartera que lidera Yolanda Díaz, previa dura negociación con los sindicatos y con la patronal. El gran cambio que se llevará a cabo es que todo este tipo de ayudas serán eliminadas y agrupadas en un único y nuevo subsidio.
Está previsto que esta nueva prestación cuente con una mayor cuantía inicial y que el acceso a la misma sea más sencillo. Sin embargo, existen cambios en la normativa que provocarán que muchos españoles no puedan acceder a ayudas a las que antes sí tenían posibilidad.
¿Qué pasará con la ayuda familiar?
Hasta ahora, los trabajadores que exprimían su prestación contributiva por desempleo, también conocida como paro, tenían posibilidad de acceder a tres nuevas ayudas: la ayuda familiar y los subsidios para mayores de 45 y 52 años. El importe de estos subsidios era igual, pero la duración de los mismos variaba en función de factores como el tiempo consumido, la prestación contributiva, la edad del solicitante o las responsabilidades familiares.
El sistema activo hasta el próximo 1 de noviembre dejaba fuera a los desempleados menores de 45 años que no tuvieran cargas familiares. Y es que estas personas no podían acceder a ninguno de estos subsidios.
La intención con los nuevos subsidios es ampliar derechos y mejorar el acceso a estas ayudas. Pero también las cuantías y la posibilidad de combinarlo con un empleo para reducir la indecisión entre aceptar un empleo que se pueda considerar precario o seguir cobrando algunas ayudas.
Lo que sucederá con estas ayudas será lo siguiente. Serán sustituidas por un nuevo subsidio que dependerá de la edad del solicitante y del paro consumido. Para los menores de 45 años, será necesario haber agotado al menos 360 días de paro para recibir un subsidio de seis meses.
En el caso de los mayores de 45 años que no tengan cargas familiares podrán acceder al mismo beneficio si han consumido al menos 120 días de prestación. En otro grupo están los desempleados con responsabilidades familiares que, tengan la edad que tengan, podrán acceder a un subsidio de hasta 24 meses si han agotado al menos 120 días de prestación. Y para los casos en los que se hayan consumido 180 días o más, la duración del subsidio podrá extenderse hasta los 30 meses.
¿Cuáles son las nuevas cuantías de los subsidios?
Uno de los grandes cambios de este nuevo sistema es que hasta ahora se cobraba el 80% del IPREM que suponían 480 euros. Sin embargo, a partir del 1 de noviembre, estas ayudas llegarán hasta el 95% en los primeros seis meses, por lo que ascenderán a los 570 euros. Los seis meses siguientes serán del 90%, es decir, 540 euros. Y después, regresarán al 80% hasta agotar el subsidio.
Otro de los cambios significativos es que se eliminan los subsidios parciales. Actualmente, si un trabajador a jornada parcial accede a un subsidio por desempleo, este lo cobra en proporción a las horas trabajadas. Con la nueva reforma, esta medida desaparece y todos los beneficiarios cobran la cuantía íntegra sin importar el tipo de jornada o el contrato de trabajo.
Por último, las personas que se encuentran en este momento cobrando o la ayuda familiar o alguno de los subsidios podrán seguir haciéndolo hasta agotar sus prestaciones, pero siempre acogiéndose a la antigua legislación.