Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. Reuters
Las cotizaciones han subido un 27% más que los salarios desde que Sánchez llegó a La Moncloa
- Las empresas identifican, junto a los márgenes empresariales, los costes laborales como los principales desafíos de cara a 2025.
- Más información: Los ingresos por cotizaciones crecen el triple que el número de trabajadores y el doble que los salarios desde 2019
Los salarios han subido con fuerza los últimos años, especialmente desde 2022, al calor de la inflación que azotó a las economías desarrolladas. Sin embargo, la hoja de costes de las empresas refleja un incremento todavía mayor en el gasto por contratar personal. Y es que lo que las compañías pagan en cotizaciones sociales y otros conceptos como las prestaciones por incapacidad se ha incrementado un 27,5% más que los sueldos desde que Pedro Sánchez llegara a La Moncloa en 2018.
Entre el primer trimestre de ese año y el tercero del presente curso, el coste laboral por hora trabajada —salario, cotizaciones a cargo del empleador y otros conceptos— ha crecido un 23,5%. Pero la evolución de los salarios ha sido más débil que la del resto de costes que afrontan los empleadores, según se desprenden del Índice de Coste Laboral Armonizado publicado este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En ese lapso temporal, el coste únicamente salarial se ha incrementado un 21,97%, al tiempo que el resto de costes lo ha hecho un 28,01%. Es decir, que las cotizaciones y el resto de gastos han crecido unos seis puntos porcentuales más que lo que las empresas desembolsan en sueldos; o lo que es lo mismo, los costes no salariales han aumentado ese 27,5% más.
Habida cuenta de la subida, no es de extrañar que, según el Estudio de la Gestión del Riesgo de Crédito en España que impulsan Crédito y Caución e Iberinform, el 37% de las empresas señalen los "excesivos costes laborales" entre los principales retos para hacer negocios. Un porcentaje muy similar (el 39%) señala, en cambio, a los "márgenes comerciales insuficientes", una variable muy relacionada por con los sueldos.
De hecho, y en línea con ese impacto de la inflación, el informe de Crédito y Caución e Iberinform revela que la mitad de las empresas indican el "aumento de los costes laborales" como uno de los principales impactos del incremento de los precios en su operativa.
Volviendo a los datos del INE, cabe destacar que en el tercer trimestre del año se ha registrado un repunte en la evolución de los costes laborales. El crecimiento del 4,7% respecto al mismo periodo del año anterior sobresale frente al incremento del 4,2% del segundo trimestre. De hecho, es el mayor repunte desde el último periodo de 2023, siempre según el índice corregido, que encadena trece trimestres al alza.
En tasa trimestral (tercer trimestre sobre segundo), el coste laboral aumentó un 1,5%, tasa cuatro décimas superior a la del trimestre anterior y la más elevada desde el primer trimestre de 2023. Con esta subida también se acumulan ya 13 trimestres de alzas trimestrales.
Convenios colectivos
La estadística de convenios colectivos que publica mensualmente el Ministerio de Trabajo también refleja cómo los incrementos salariales todavía se mantienen con fuerza. Así, los salarios pactados en convenio subieron de media un 3,05% hasta noviembre. La cifra, ligeramente inferior a la de octubre (3,06%), se sitúa más de seis décimas por encima del IPC adelantado de noviembre, que fue del 2,4%.
El aumento salarial registrado es el segundo más elevado de este año y supera el 3% por cuarto mes consecutivo, un nivel que no se alcanzaba desde diciembre de 2023. Los convenios firmados durante este ejercicio han contemplado subidas salariales medias del 3,74%, mientras que los acordados en ejercicios anteriores, con efectos en 2024, presentan un incremento del 2,89%.
A pesar de estas subidas, más de dos de cada tres trabajadores amparados por convenios carecen de cláusulas de revisión salarial para evitar pérdidas de poder adquisitivo. De los 3.556 convenios registrados hasta noviembre, sólo el 24,4% incluye este tipo de garantías, afectando al 33,1% de los 10,2 millones de trabajadores protegidos.
